ZAMBOANGA (Filipinas).- El grupo separatista musulmán Abu Sayyaf incumplió su compromiso de liberar a al menos tres malasios retenidos en la isla de Joló, con lo que el presidente de Filipinas, Joseph Estrada, viajó hoy a Estados Unidos sin resolver la larga crisis de los rehenes.
Pese a que Abu Sayyaf había anunciado que hoy liberaría a los tres malasios secuestrados y posiblemente a las dos personas de nacionalidad filipina, concluyó la jornada sin solución y el enviado del Gobierno filipino regresó de Joló con "las manos vacías".
"No se qué ha ocurrido, pero algo debió pasar", dijo a los periodistas el consejero de seguridad del equipo negociador, general retirado Guillermo Ruiz.
Ruiz, que viajó a Joló para intentar averiguar las causas por las que se suspendió la liberación de los rehenes, regresó esta noche a Zamboanga, una ciudad en el extremo sur de Mindanao, donde aseguró que en la isla se quedó un emisario del Gobierno para averiguar qué ocurrió.
Al ser preguntado que cuándo se prevé la liberación de los rehenes, el general retirado dijo que "tal vez mañana" e insistió en que, pese a todo, "me siento optimista" en cuanto a una pronta resolución de la crisis.
Lo cierto es que han pasado 91 días desde que Abu Sayyaf capturó en la isla malasia de Sipadan a un grupo de 21 personas, de las que aún tiene en cautividad a tres malasios, dos filipinos, dos alemanes, dos franceses, dos finlandeses, dos sudafricanos y una libanesa.
El presidente de Filipinas, Joseph Estrada, declaró recientemente que este conflicto estaría resuelta antes de su viaje oficial a Estados Unidos que emprendió hoy, pero no ha sido así y esta tarde tomó un avión con el peso a su espalda de una crisis que le ha provocado tensiones diplomáticas con los países que tienen ciudadanos entre los secuestrados.
Además de los rehenes antes citados y que fueron secuestrados en Basilan, Abu Sayyaf también tiene retenidos en la isla de Joló a 13 evangelistas secuestrados el 20 de junio cuando llegaron a esta isla a rezar por los cautivos, un reportero alemán capturado el 2 de julio y tres periodistas franceses retenidos nueve días más tarde.
El general Guillermo Ruiz aseguró que la prioridad ahora es liberar a las mujeres, mientras fuentes cercanas a los negociadores, que pidieron el anonimato, explicaron que el motivo es porque se podría estar preparando una operación militar en Joló.
Fuentes militares explicaron hoy que una operación armada podría causar la muerte no sólo de los secuestradores y soldados, sino también de alguno de los rehenes, por lo que sería la última opción.
El consejero de seguridad también desmintió que se haya pagado un rescate por los rehenes que ya han conseguido su libertad. "Si ha pasado dinero de una mano a otra, no somos conscientes de ello", asintió.
Aunque el general filipino y los países que tienen ciudadanos entre los rehenes han reiterado en varias ocasiones que no habían pagado ningún rescate, varios emisarios de los negociadores reconocieron que se había conseguido la libertad de los otros cuatro malasios la semana pasada a cambio de tres millones de dólares.
La rehén alemana Renate Wallert recuperó la libertad el 14 de julio pasado después de que los separatistas musulmanes recibieran supuestamente otros tres millones de dólares.
Mientras tanto, hoy se informó de que dos miembros del equipo de televisión filipina ABS-CBN han sido también retenidos por Abu Sayyaf, algo que desmintió el general retirado.
Abu Sayyaf no es el único grupo musulmán que lucha en Mindanao por la creación de un estado islámico independiente, pero sí es el que acumula la historia más sangrienta por su trayectoria de atentados, asesinatos y secuestros.
