JERUSALEN.- Las autoridades militares israelíes han resuelto dejar en suspenso el refuerzo de sus tropas en los territorios aún ocupados de Cisjordania y Gaza, informaron oficiales de las Fuerzas Armadas.
La noticia fue confirmada esta mañana por el viceministro de Defensa, Efraim Sne, segundo del primer ministro Ehud Barak en esa cartera, tras el fracaso de la cumbre tripartita para la paz de Camp David, que concluyó ayer martes en Estados Unidos.
Sne admitió que existe el peligro de que estalle la violencia en esos territorios, "pero esto no tiene que ser necesariamente así", e "Israel se esfuerza en que no ocurra".
Varias organizaciones palestinas, entre ellas Al Fatah, el movimiento de Yaser Arafat, llevarán a cabo hoy un paro que, según se anunció a comienzos de esta semana, tenía por cometido respaldar a su líder en las negociaciones de Camp David.
El encargado de Asuntos de Jerusalén en la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Faisal Huseini, declaró que en medios de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), de Arafat, "no hay planes de usar la violencia contra Israel".
Huseini expresó su esperanza de que las Fuerzas Armadas de Israel no recurran a provocaciones contra la población palestina.
El objetivo de las autoridades castrenses, que han decidido mantenerse en sus posiciones sin aumentar sus efectivos, es no "provocar" a los palestinos pues "Israel no tiene la menor intención de fomentar la tensión", dijo, por su parte, Sne, pero en caso de que se produzcan disturbios, "nosotros somos la parte más fuerte", advirtió.
En cuanto a las armas suministradas últimamente a los colonos de los asentamientos judío en previsión del fracaso de las negociaciones de Camp David y de un levantamiento palestino, Sne dijo que se trata de armas para su autodefensa, y aclaró que "la seguridad (en Cisjordania y Gaza) está a cargo del ejército".
Fuentes de las Fuerzas Armadas aseguraron que sus efectivos están preparados "para hacer frente a cualquier eventualidad", incluido el caso de que los palestinos decidiesen de forma masiva - como temen algunos- marchar sobre los asentamientos judíos para manifestarse.
El viceministro de Defensa dijo que de momento existe coordinación entre las fuerzas de seguridad de su país y las que responden al gobierno de Arafat y expresó su esperanza de que esa coordinación continúe si fuesen puestas a prueba en caso de estallar una ola de violencia.
En mayo pasado, durante una ola de disturbios palestinos con motivo de la "Nakba" (Desastre nacional), tras el 52 aniversario del Estado israelí, se produjeron choques armados entre fuerzas de seguridad palestinas y las de Israel.
