MANILA.- Negociadores filipinos anunciaron hoy miércoles que se concretan los últimos detalles para lograr la libertad de una docena de rehenes extranjeros en poder de rebeldes musulmanes, tras resolverse los problemas que impidieron la liberación de los cautivos la semana pasada.
Los rehenes debían haber sido dejados en libertad el sábado, junto con una docena de evangelistas filipinos que también se hallaban en poder de los rebeldes de Abu Sayyaf. Pero el negociador jefe del gobierno, Robert Aventajado, dijo que el plan fracasó porque los rebeldes temían un ataque militar tras la liberación de todos los rehenes.
Los rebeldes habían ofrecido la libertad de sólo dos rehenes, una oferta que los negociadores rechazaron siguiendo instrucciones del presidente Joseph Estrada, quien deseaba que todos los rehenes fuesen liberados a la vez.
Un miembro del grupo negociador dijo que la mayoría de los problemas han sido solucionados ahora, y que los negociadores concretan con los rebeldes los últimos detalles de la liberación del grupo, que podría materializarse en los próximos días.
"Ellos saben ya que vamos a cumplir con lo que nos pidieron", dijo el negociador. "Y han reaccionado de manera positiva".
Los guerrilleros retienen a tres franceses, dos alemanes, dos finlandeses y dos sudafricanos secuestrados el 23 de abril en Malasia, y a tres periodistas de la televisión francesa capturados el mes pasado cuando visitaron el escondite de los rebeldes.
Todos están confinados a campamentos primitivos de las montañas en Jolo, a unos 940 kilómetros al sur de Manila.
Esta semana, el presidente Estrada dio a Aventajado el derecho de "tomar decisiones sobre el terreno" en lo que se refiere a la liberación de los rehenes.
