ROMA.- El gobierno de Italia criticó hoy, viernes, con dureza al departamento de Estado norteamericano por advertir a los ciudadanos estadounidenses residentes en el país transalpino de posibles represalias tras la ejecución en un penal de Virginia del reo de ascendencia italiana Derek Rocco Barnabei.
Partidos políticos y asociaciones contra la pena de muerte se han movilizado en las últimas semanas en Italia, con los medios de comunicación a la cabeza, para pedir la suspensión del ajusticiamiento de Barnabei, que en sus últimas palabras se declaró inocente de haber violado y matado a su novia en 1993.
"Italia es un país de gran civilidad", replicó el subsecretario de la Presidencia del Gobierno, Enrico Micheli, en unas declaraciones en televisión.
El Departamento de Estado de Estados Unidos afirma en un comunicado hecho público poco antes de que Barnabei recibiera la inyección letal que acabó con su vida que "se ha enterado de que desconocidos han lanzado amenazas contra estadounidenses" en Italia en el caso de que se le aplicara la pena capital.
"Aunque no hemos podido determinar si las amenazas son creíbles -prosigue la nota- consideramos prudente advertir a los ciudadanos estadounidenses sobre esta información para que tomen las medidas de precaución que estimen necesarias".
El subsecretario de la Presidencia del Gobierno italiano salió al paso de esta advertencia calificándola de "hecho sorprendente y de extraordinario mal gusto, porque Italia es una nación de gran civilidad".
Michelis afirmó que el aviso del Departamento de Estado "es como si nosotros advirtiésemos a nuestros ciudadanos que van a Estados Unidos diciéndoles: atención, vais a un país donde existe la pena de muerte"
"Todas las manifestaciones de estos días -afirmó el subsecretario italiano- han sido de gran piedad y gran tolerancia".
Las movilizaciones llevadas a cabo en Italia en las últimas semanas, que han contado con reiterados llamamientos del papa Juan Pablo II para que se suspendiera la ejecución, confluyeron anoche en concentraciones y manifestaciones en diversas ciudades del país.
La reunión más significativa se llevó a cabo ante el Coliseo de Roma, que este año, coincidiendo con el Jubileo católico, enciende sus luces cada vez que se conmuta una pena capital en el mundo o un país acepta su abolición.
El anfiteatro romano fue uno de los platós que utilizó el primer canal de la televisión pública RAI para emitir un programa de más de cuatro horas, en el que participaron algunos de los principales líderes políticos del país y que incluyó conexiones en directo con el penal de Virginia donde fue ejecutado Barnabei a las 01.05 hora GMT.
Este despliegue televisivo tiene hoy su continuidad en la prensa italiana que abre sus ediciones, con gran despliegue, con el ajusticiamiento por inyección letal de este reo de 33 años, condenado en un proceso que, según la defensa, presentó diversas irregularidades como la desaparición y posterior reaparición de algunas pruebas consideradas claves.
