BILBAO.- Miles de personas acudieron este sábado a la manifestación contra la violencia del grupo separatista ETA convocada en Bilbao por el presidente del gobierno autonómico vasco, Juan José Ibarretxe.
La marcha fue precedida por una intensa polémica y a la que no acudieron el Partido Popular (PP), Unidad Alavesa (UA), Euskal Herritarrok (EH), el Foro de Ermua ni la Asociación de Víctimas del Terrorismo de Euskadi.
La manifestación estuvo encabezada por ocho ciudadanos anónimos con una pancarta que decía: "ETA no. Bakea ETA ez. Paz".
Tras ella, bajo un mar de paraguas bajo la lluvia, se encontraban familiares de víctimas de ETA, Ibarretxe y todo el gobierno vasco, y los dirigentes de los partidos que se sumaron a la manifestación.
Entre estos estaba Javier Arzalluz, del Partido Nacionalista Vasco (PNV), Gorka Knrr, de Eusko Alkartasuna (EA), José Luis Rodríguez Zapatero, del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), y Javier Madrazo, de Izquierda Unida (IU).
"Está claro que el gobierno español y su partido han intentado boicotear esta manifestación", declaró a Reuters Knrr, secretario general de EA.
"Nos manifestamos aquí contra la violencia, de una manera firme y democrática, como siempre hemos hecho", añadió.
El acto, que comenzó pasadas las cinco de la tarde, concluia en el Ayuntamiento de Bilbao con un minuto de silencio en honor a todas las víctimas de ETA y la lectura de un comunicado por parte de la viuda del ex gobernador civil de Guipúzcoa, Juan María Jáuregui, cuyo asesinato fue atribuido a ETA este verano.
Las víctimas de la violencia y el PP calificaron la convocatoria de Ibarretxe de "oportunista" ante la debilidad política del PNV en el Parlamento de Vitoria.
La juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios decretó el sábado el ingreso en prisión de Ivon Muñoa detenido el pasado martes en Eibar, Guipúzcoa, por su presunta vinculación en el secuestro y asesinato del concejal del PP Miguel Angel Blanco, dijo el sábado el ministerio del Interior.
