BOGOTA.- Dos de siete congresistas que desde hace dos semanas estaban en poder de un grupo paramilitar fueron liberados hoy en una zona al norte del país, informó una fuente allegada a los secuestrados.
Francisco José Jattín, ex parlamentario liberal, dijo en una entrevista radial que había hablado con los familiares de los legisladores Miguel Pinedo Vidal y Juan Manuel López, quienes "confirmaron su liberación".
Jattin en diálogo con la emisora Radionet, dijo que aspiraba a que en las "próximas horas se dé la liberación de Zulema (hija suya) y el resto de parlamentarios".
Las derechistas Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), comandadas por Carlos Castaño, secuestraron siete congresistas desde hace dos semanas en diferentes partes del país, como mecanismo de presión para ser escuchados por el Gobierno.
Castaño ha pedido al Gobierno que las negociaciones para el intercambio de guerrilleros presos por guerrilleros y policías enjaulados en prisiones improvisadas en la selva, incluya también a la totalidad de civiles en poder de los guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Aunque aún no hay un acuerdo entre el Gobierno y la guerrilla para el intercambio de prisioneros, se espera que esta semana se reanuden los diálogos para estudiar el tema de los retenidos por las partes.
Un comandante que se identificó como "Julián" dijo a la radio que "no se exigió nada (a los familiares). Simplemente se trataba de ser escuchados por el Gobierno nacional".
Señaló que los dos secuestrados fueron entregados a una comisión humanitaria encabezada por el ministro del Interior, Humberto de la Calle Lombana. Esta es la primera vez que un representante del Gobierno colombiano se entrevista con paramilitares.
"Mañana martes a una comisión del Comité Internacional de la Cruz Roja serán entregados otros cinco congresistas en Antioquia y Bolívar", dos provincias al norte y noroeste del país, dijo Julián.
Los paramilitares aseguraron al funcionario que respaldaban la "decisión de las comunidades del sur de Bolívar (un departamento al norte) que se oponen rotundamente al despeje militar" de una zona de 4.700 kilómetros cuadrados para el Ejército de Liberación Nacional (ELN), el segundo grupo guerrillero más grande del país.
Muchos analistas han pedido que en las negociaciones de paz sean incluidos, en una mesa específica, los grupos paramilitares por tratarse de otro grupo que forma parte del conflicto de esta nación que lleva casi 40 años.