JERUSALEN.- Francotiradores palestinos dispararon este lunes contra vehículos israelíes en dos ataques en Cisjordania y mataron a tres hebreos, informaron un vocero de los colonos judíos y la radio del ejército.
Las emboscadas constituyeron una nueva escalada en las siete semanas de violencia que han causado más de 200 muertos, en su mayoría palestinos. Los ataques a un automóvil civil y un ómnibus militar israelíes fueron los primeros en la parte de Cisjordania controlada por Israel en lugar de la Autoridad Palestina.
Dos adolescentes palestinos que arrojaban piedras murieron bajo fuego del ejército israelí durante una refriega en Khan Yunis, en el sur de Gaza. Las emboscadas se produjeron simultáneamente cerca de Ramalá, en Cisjordania, dijo Yehoshua Mor-Yosef, vocero de los colonos. Añadió que tres israelíes perecieron y por lo menos cinco resultaron heridos.
En Hebrón, varios cientos de palestinos se manifestaron en la Universidad Islámica. Algunos portaban pistolas y metralletas, coreando la consigna "el disparo es el único idioma que entiende el enemigo". Un oficial israelí advirtió que el ejército endurecería las represalias por los crecientes ataques palestinos contra soldados y civiles israelíes.
Los últimos días se han caracterizado por la disminución de los motines masivos con jóvenes que arrojan piedras y bombas incendiarias, junto con un aumento notable del fuego palestino contra posiciones israelíes.
El fuego proviene de armas de la policía de la Autoridad Palestina, que las obtuvo bajo acuerdos provisorios con Israel, y de milicianos Tanzim asociados con Fatah, el partido del jefe de gobierno Yasser Arafat.
Los israelíes dicen que los milicianos Tanzim obtuvieron ilegalmente las armas y exigen que se les desarme. Los palestinos sostienen que los Tanzim defienden a su pueblo de la agresión israelí.
El vocero del gobierno israelí, Moshe Fogel, dijo que el aumento del fuego palestinos significa que el conflicto ha dejado de ser una insurgencia civil para convertirse en "guerra y terrorismo".
Dijo que las fuerzas israelíes no pueden seguir siendo "los receptores del fuego en situaciones de combate sin tomar las medidas necesarias. Hay que ajustar las normas de combate", dijo a corresponsales extranjeros.
Las normas actuales permiten a los soldados israelíes que abran fuego sólo si sus vidas están en peligro o si les disparan, aunque el mando militar dice que los comandantes tienen amplios poderes de decisión.
Los palestinos acusan a los israelíes de responder a las manifestaciones con fuerza excesiva.
