BELGRADO.- El ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic hizo ayer un desafiante retorno político, ganando la reelección como líder del Partido Socialista de Serbia y denunciando como un golpe las movilizaciones callejeras que lo sacaron del poder.
Un impenitente Milosevic acusó a Occidente del genocidio contra los serbios, dijo que los medios de comunicación yugoslavos estaban controlados por servicios de inteligencia extranjeros y llamó al tribunal de crímenes de guerra de Naciones Unidas "la nueva Gestapo".
El ex presidente yugoslavo, responsabilizado por Occidente de cuatro guerras en los Balcanes en la pasada década, lanzó sus ataques en el congreso especial del Partido Socialista, de cara a elecciones parlamentarias previstas para el 23 de diciembre.
"La guerra es digitada contra este país con dinero. Grandes sumas de dinero son dadas a quienes se supone que aceptan cualquier cosa que sea contra este país", dijo Milosevic en su primera aparición desde que perdió el poder el mes pasado.
Los delegados, algunos con banderas yugoslavas, dieron a Milosevic una ovación de pie cuando éste ingresó al salón de la conferencia, sonriendo entre la multitud.
En su discurso, Milosevic acusó a sus enemigos de tratar de reescribir la historia sobre el bombardeo a Yugoslavia realizado el año pasado por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
"La situación es absurda. Aquellos que defendieron el país y estaban en el país durante la guerra son declarados enemigos ahora", dijo Milosevic mostrado por la televisión en el congreso al que asistían unos 2.000 delegados.
"Aquellos que atacaron al país, respaldaron los bombardeos y cooperaron con los agresores ahora aparecen en el papel de patriotas y salvadores del país. Los ladrones están llamando ladrones a la gente honesta", añadió.
El congreso parecía ser una victoria para la línea dura de Milosevic, que ahora apunta a reorganizar su Partido Socialista tras la debacle electoral del mes pasado.
