MOSCU.- El Presidente Vladimir Putin dijo hoy que Rusia logró detener un deslizamiento hacia la desintegración política, pero que ahora necesita nuevas medidas para estabilizar una economía de viejo estilo que todavía marcha cuesta arriba.
En su discurso anual sobre el estado de la nación, el jefe del Kremlin, de 48 años, dijo que Moscú está retirando sus tropas de Chechenia después de conquistar sus principales objetivos militares. Sin embargo, advirtió que la amenaza de ataques rebeldes sigue siendo alta.
"La desintegración del estado, mencionada en el discurso anterior, fue detenida", dijo Putin a los parlamentarios en el Pabellón de Mármol, un opulento salón del Kremlin utilizado muchos años por el Partido Comunista para las reuniones del Comité Central.
Asimismo, el mandatario ruso instó a una mayor integración europea y criticó a la Organización del Tratado del Atlántico Norte, en un discurso de 63 minutos en el que no mencionó varios temas de actualidad, como la libertad de prensa, la reforma militar y las relaciones con Estados Unidos.
Tras pintar un panorama amplio de la estabilidad política que ha logrado forjar en su primer año en el cargo, Putin dedicó gran parte de su discurso a las reformas económicas, legales y sociales, dejando en claro que todavía falta mucho por hacer.
"Los niveles de vida de la población todavía son muy bajos", dijo. "Todavía tenemos graves riesgos, tanto económicos como sociales".
Indicó que los cambios políticos que fueron implementados desde que asumió la presidencia resultaron favorables el año pasado. Entre ellos se registró la mejor tasa de crecimiento en casi 30 años.
No obstante, dijo que la estabilidad económica este año es relativa, ya que depende demasiado de las materias primas y de los vaivenes del mercado.
"En los últimos meses, el empeoramiento de varios indicadores económicos plantea preocupaciones, especialmente en vista del desarrollo incierto de la economía mundial", agregó Putin en su discurso a las dos cámaras del parlamento: la Duma Estatal, o Cámara Baja, y el Consejo de la Federación, la Cámara Alta.
Putin, quien emergió de la oscuridad en agosto de 1999 cuando en entonces Presidente Boris Yeltsin lo nombró Primer Ministro, fue elegido Presidente hace un año con un programa de promesas de restaurar la estabilidad política y algo de la gloria perdida de Rusia.
El año pasado, Putin invitó a los liberales a manejar la economía y declaró su intención de reducir los gastos y crear un clima que atrajera a los inversionistas. Promulgó además leyes que permiten la venta de tierras que no forman parte de granjas y cambió el código impositivo para alentar las contribuciones.
Putin ya había prometido reducir y reestructurar el gobierno y la semana pasada nombró a sus aliados Sergei Ivanov y Boris Gryzlov en los ministerios de Defensa e Interior.
