WASHINGTON.- El secretario de Estado Colin Powell expresó su pesar el miércoles por la muerte de un piloto chino cuando su caza chocó con un avión de reconocimiento de Estados Unidos. Pero el gobierno del Presidente George W. Bush se mantuvo firme en su negativa a pedir disculpas a Beijing.
"Deploramos la pérdida de vida de ese piloto chino, pero ahora necesitamos seguir adelante", dijo Powell a la prensa. "Necesitamos resolver este asunto y estamos utilizando todas las vías disponibles para hablar con el lado chino a fin de intercambiar explicaciones".
El vocero de la Casa Blanca Ari Fleischer dijo que la posición descrita por Powell fue expresada previamente en el día por el embajador norteamericano en Beijing en una reunión con el canciller chino.
"Los Estados Unidos están preocupados por los militares chinos desaparecidos y hemos expresado nuestra preocupación y nuestro pesar por ese incidente", dijo Fleischer.
Powell calificó el choque de accidente trágico y atribuyó a la destreza de la tripulación norteamericana haber logrado el aterrizaje a salvo del aparato.
Previamente, Fleischer dio la respuesta habitual del gobierno a la pregunta de si deben pedirse disculpas a Beijing.
"El gobierno de Estados Unidos no comprende por qué debería disculparse", dijo Fleischer a la prensa. "Nuestro avión volaba en espacio aéreo internacional y (la tripulación) nada malo hizo".
Fleischer agregó que el embajador estadounidense Joseph Prueher fue convocado a una reunión el miércoles por el ministro chino de Relaciones Exteriores Tang Jiaxuan, en Beijing. Tang demandó una disculpa por el incidente y Prueher se negó a darla, agregó Fleischer.
El embajador repitió la demanda hecha 24 horas antes por el Presidente George W. Bush para que les fuera devuelto el avión -que debió realizar un aterrizaje de emergencia luego de la colisión del domingo- así como sus 24 tripulantes.
El embajador chino en Washington, Yang Jiechi, reiteró la afirmación de Beijing de que los Estados Unidos tienen la culpa del incidente y la responsabilidad de poner fin a la disputa. "China es la parte afectada", dijo en una entrevista con la cadena noticiosa por cable CNN.
A la pregunta de cuánto tiempo durará el estancamiento diplomático, el embajador respondió: "No lo sé. Creo que quizá deban preguntarle eso a alguno de sus compatriotas. Yo creo que debía terminar enseguida... y ser tratada con el mayor cuidado".
China sostiene que la tripulación está en "custodia preventiva" y que Estados Unidos debería disculpares por el incidente que la llevó a la isla de Hainan.
"Este accidente tiene el potencial de socavar nuestras esperanzas de una relación fructífera y productiva entre nuestras naciones", dijo Bush el martes. "Para evitar que eso suceda, es necesario que nuestros hombres y mujeres de servicio (militar) regresen a casa".
Los representantes diplomáticos estadounidenses se reunieron el martes con miembros de la tripulación en la isla Hainan e informaron que están en buenas condiciones.
Los funcionarios chinos se negaron a permitir que se quedaran solos con la tripulación y tampoco han permitido que los miembros de ésta se comuniquen con sus familiares en Estados Unidos.
El secretario de Estado Colin Powell utilizó un lenguaje más directo que el de la Casa Blanca y aunque dijo que la reunión era un paso adelante, pero que la tripulación estaba "detenida".
"Se les mantiene incomunicados, en circunstancias que no considero aceptables", dijo Powell. "Los chinos sostienen que están siendo protegidos -no sé de qué. Según mi apreciación, están detenidos".
El miércoles, el Presidente chino Jiang Zemin demandó públicamente por primera vez la disculpa estadounidense, antes de viajar a la América latina.
"La parte estadounidense debería disculparse ante el pueblo chino", dijo Jiang según la agencia de noticias Xinhua.
