BUENOS AIRES.- El obispo de Quilmes, monseñor Jorge Novak, considerado el más destacado exponente del progresismo católico de la Argentina, murió en la madrugada del lunes, informó un portavoz de esa diócesis.
Monseñor Novak tenía 72 años y su deceso se debió a un ataque cardíaco. El obispo se recuperaba de una reciente operación.
Ocupaba el obispado de Quilmes, 25 kilómetros al sur de esta capital, desde 1976, año en que se instauró en la Argentina una dictadura militar, con la cual Novak tuvo frecuentes y ásperos enfrentamientos.
Monseñor Novak fue durante varios años titular del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos, en el que también actuaban pastores protestantes y rabinos.
El obispo Novak estuvo muy cerca del desaparecido Movimiento de Sacerdotes para el Tercer Mundo, que sustentaba posiciones avanzadas y varios de cuyos integrantes fueron secuestrados y asesinados durante el régimen militar que concluyó en 1983.
Novak, permanente difusor de los principios de la doctrina social de la Iglesia Católica, ocupó hasta fecha reciente la titularidad de la Pastoral de la Salud dentro del episcopado argentino.
