JERUSALEN.- Dos palestinos causaron hoy heridas a trece personas al lanzar una carga explosiva en el casco viejo de la ciudad de Beersheva, en el sur de Israel, antes de ser apresados por agentes de la policía.
Se trata del segundo ataque palestino en una ciudad de Israel en las últimas 72 horas y cuando la ciudadanía de este país, sacudida por una ola de sangrientos atentados el pasado marzo, parecía recuperar la seguridad tras la "Operación Muro de Defensa", la gran ofensiva militar del mes de abril en ciudades de Cisjordania.
Uno de los dos atacantes también resultó herido al ser golpeado por viandantes israelíes en el casco antiguo de esa localidad, la "capital del desierto" meridional del Néguev.
El estado de los heridos, alojados en el hospital Soroca de esa ciudad, en el cual también fue ingresado ese atacante, es leve.
El ataque, que no se ha atribuido por el momento ninguna de las facciones de la resistencia contra la ocupación israelí en Cisjordania y Gaza, se registró poco después de que comenzaran a salir de la Basílica de la Natividad de Belén los 123 palestinos que estuvieron cercados por tanques israelíes durante 38 días en ese santuarios cristiano.
La "Operación muro de defensa", que comenzó el pasado 29 de marzo y concluyó oficialmente hace tres semanas, bajo el lema "vamos a defender nuestra casa", tuvo como objetivo "erradicar la infraestructura terrorista" en localidades palestinas del territorio cisjordano.
El primero de los dos ataques de esta semana fue perpetrado el martes en la ciudad de Rishon Le Sion, donde un suicida del Movimiento de la Resistencia Islámica (HAMAS) se inmoló en un salón de juegos de azar al activar una maleta llena de explosivos y causó la muerte a 15 civiles y heridas a otros 55.
A raíz de ese atentado, el Gobierno de unidad nacional del Primer Ministro israelí, Ariel Sharón, se disponía a lanzar ahora una nueva ofensiva, esta vez "contra focos terroristas" de HAMAS y de la Yihad Islámica en la franja de Gaza, según el ministro de Exteriores Simón Peres.
Hasta la fecha, y en contra de lo habitual en estos casos, se ignora la identidad del suicida, ni si llegó desde la franja de Gaza como se supone en los organismos israelíes de Seguridad.
El atentado contra civiles fue condenado por el Presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, quien ordenó en las últimas 48 horas a sus fuerzas en Gaza el arresto de más de 30 activistas de HAMAS, su principal grupo opositor.
A pesar de haber sido apresados por la policía, uno de ellos cuando huía en dirección hacia la ciudad cisjordana de Hebrón, no se ha revelado aún a qué facción pertenecen los atacantes de Beersheva, la cuarta ciudad del país con unos 200.000 habitantes.
Fuentes policiales dijeron que "de milagro no ocurrió una tragedia", pues parte de los explosivos que llevaban consigo no estallaron. El ataque se produjo junto al banco Hapoalim del casco viejo de esa localidad cuando centenares de personas hacían las compras para la jornada ritual del descanso sabático (shabat).
A pesar del llamamiento del Presidente Arafat, que se encuentra en la ciudad autónoma de Ramallá, dirigentes de HAMAS y entre ellos su conocido mentor ideológico, el jeque Ajmed Yasín, han advertido en Gaza de que "seguirán combatiendo contra las agresiones sionistas".
El ministro de Información y Cultura de la ANP, Yaser Abed Rabo, también condenó los ataques contra civiles en el territorio de Israel porque "atentan contra los intereses nacionales de nuestro pueblo", alzado desde hace casi dos años por su independencia de la ocupación israelí en los territorios de Cisjordania y de Gaza.
