WASHINGTON. - El gobierno estadounidense, adelantándose a la posibilidad de un Irak sin su presidente Saddam Hussein, ha comenzado a organizar "grupos de trabajo" que implantarían política el país árabe una vez derrocado el líder.
El miércoles comenzaron en Washington las reuniones para el establecimiento de un sistema de contabilidad libre de corrupción en ese país.
El grupo de expertos, Organizaciones No Gubernamentales y disidentes sostendrá seis reuniones sobre distintos aspectos de la sociedad iraquí, asumiendo que Hussein será eventualmente derrocado.
El portavoz del Departamento de Estado, Philip Reeker, dijo que el grupo, denominado "Proyecto Futuro de Irak", se concentrará en sus dos días de actividades en "planear un marco económico y financiero para Irak, contemplando el día inevitable después de la caída de Saddam Hussein".
Otros grupos de trabajo se concentran en el establecimiento de un sistema legal, de defensa, petrolero y energético.
Las reuniones del grupo son al margen de otra importante reunión de opositores iraquíes que se llevará a cabo el viernes con el subsecretario de Estado para Asuntos Políticos, Marc Grossman, y el subsecretario de Defensa, Douglas Feith, como anfitriones.
