BUENOS AIRES.- Cientos de desempleados argentinos que en tiendas improvisadas habían pernoctado frente a la presidencia, levantaron el jueves su protesta en reclamo de trabajo y la reciente visita al país del secretario del tesoro norteamericano Paul O’Neill.
El grupo de desempleados denominado "Frente Piquetero Nacional", que contó con el apoyo de media docena de pequeños partidos de izquierda, había iniciado la protesta en la tarde del miércoles bajo la consigna "Fuera O’Neill y el FMI de la Argentina".
Tras una áspera negociación con la policía, que les negaba el acceso a la plaza, los "piqueteros" lograron ingresar al paseo e instalar allí pequeñas tiendas que usaron para pasar la noche y cocer guisos a las brasas.
O’Neill concluyó en la noche del miércoles una visita de 24 horas a Buenos Aires durante la que prometió al gobierno del Presidente Eduardo Duhalde apoyar las gestiones argentinas para un pronto acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, a fin de que el país reciba asistencia financiera.
Los "piqueteros" calificaron a la jornada de lucha como "una victoria del pueblo que no se resigna a vivir como exige el Fondo Monetario Internacional y como lamentablemente acepta el gobierno".
Al mismo tiempo aseguraron que continuarán con su plan de lucha en favor de un aumento salarial, la devolución de los haberes recortados a docentes, estatales y jubilados y el reclamo de trabajo y alimentos para organizaciones de desocupados.
Argentina atraviesa una profunda recesión económica que ya lleva cuatro años y que ha disparado el desempleo al 21,5% y dejado en la pobreza a más de la mitad de sus 36 millones de habitantes.
Varias calles céntricas de Buenos Aires permanecieron cerradas al tránsito mientras duró la protesta.
