PORTLAND.- El grupo tabacalero Philip Morris deberá pagar 79,5 millones de dólares (unos 66 millones de euros) a los familiares de un fumador que murió de cáncer de pulmón en 1997.
Una sentencia de un tribunal popular en ese sentido, dictada en 1999, fue confirmada el miércoles por un tribunal de apelaciones en el estado norteamericano de Oregon.
Philip Morris ya anunció que recurrirá y llevará el caso ante la Corte Suprema del Estado de la costa oeste de Estados Unidos.
De acuerdo con la primera sentencia de los jurados, la empresa debía pagar a los familiares del fumador 800.000 dólares en concepto de indemnización y 79,5 millones de dólares en concepto de multa.
La jueza que entendió en aquella causa consideró la suma "excesiva" y la redujo a 32 millones de dólares. Un tribunal de apelaciones determinó en 2002, que la cifra más alta era totalmente razonable para Philip Morris.
Un año después, la Corte Suprema en Washington instó al tribunal en Oregon a tomar en consideración una cifra menor. La Supreme Court argumentó que las multas deben guardar una relación apropiada con la indemnización.
De acuerdo con la sentencia del tribunal de apelaciones del miércoles, sin embargo, el consorcio tabacalero distribuyó conscientemente un producto dañino y merece por eso la pena más alta.
El estadounidense murió en 1997 a los 67 años de cáncer de pulmón, después de haber fumado durante 40 años cigarrillos de Philip Morris.
En el juicio, se acusaba al fabricante de haber engañado a los consumidores respecto de los efectos del tabaco. En su lecho de muerte, el hombre pidió a su familia que llevara a juicio al grupo tabacalero.
Los abogados de Philip Morris argumentaron que el fumador conoce el riesgo que implica el consumo de tabaco.
