BAGDAD.- Elementos rebeldes atacaron a soldados británicos en un retén en el centro de Irak, dejando tres muertos y ocho heridos en un atentado suicida y ataque con morteros, en contra de los militares enviados a esa zona de alto riesgo para dejar a las tropas norteamericanas libres para un asalto contra el bastión insurgente de Falluja.
Los soldados norteamericanos castigaron Falluja con ataques aéreos y de artillería el jueves, debilitando a los militantes en preparación al esperado ataque. Los altavoces en las mezquitas de la ciudad difundieron versículos del Corán y arengas como "Dios es Grande", durante el ataque, dijeron pobladores locales.
En una serie de ataques aéreos ocurridos temprano el vienes, aviones norteamericanos atacaron varios blancos en Faluyá, entre ellos un sistema de barreras reforzadas con bombas en la parte sureste de la ciudad. También atacaron un puesto de comando, supuestas áreas desde donde eran lanzados ataques y un arsenal, dijo el teniente Nathan Braden, de la I División de la Marina.
Dos infantes de marina murieron y otros cuatro resultaron heridos durante operaciones de combate en Anbar, provincia al occidente de Bagdad, dijo el ejército norteamericano el viernes. El ataque ocurrió el jueves, pero no se dieron más detalles sobre lo ocurrido.
Mientras tanto, en Balad, 80 kilómetros al norte de Bagdad, un soldado norteamericano murió y otro resultó herido cuando una bomba estalló al paso de su vehículo, dijo el ejército norteamericano el viernes.
El incidente ocurrió también el jueves, por la noche. El soldado herido fue evacuado a un centro de tratamiento militar.
