FALLUJA.- Horas después de que marines estadounidenses declararan el viernes que habían acorralado a los insurgentes en el sur de Falluja, estalló una batalla cerca de una mezquita en el norte de la ciudad.
Insurgentes, decididos a demostrar que la ofensiva liderada por el ejército estadounidense en Falluja no los ha amedrentado, contraatacaron con disparos y explosivos en varios lugares, incluida la ciudad de Mosul.
El intenso enfrentamiento se produjo cerca de una mezquita en el distrito de Jolán, según un corresponsal de Reuters.
En muchas partes se escuchaba el sonido de ráfagas de ametralladoras y de explosiones de granadas. Asimismo, había hombres armados en los techos cercanos a la mezquita.
Por su parte, autoridades iraquíes, que tratan de contener los brotes de violencia en ciudades de musulmanes sunitas, impusieron esta semana un toque de queda en Bagdad, Mosul, Baiji, Ramadi y Falluja. En Samarra, el toque de queda ha estado en vigor desde la incursión militar estadunidense el mes pasado.
La capitana del ejército de Estados Unidos, Angela Bowman, dijo que Mosul había estado en calma durante la noche con el toque de queda impuesto a sus tres millones de residentes después de los ataques del jueves contra estaciones de policía.
Por otra parte, las fuerzas lideradas por Estados Unidos que dijeron tener acorralado a los insurgentes en el sur de Falluja, informaron el viernes que durante la ofensiva han muerto “cientos” de rebeldes.
Asimismo, 18 efectivos estadounidenses y cinco iraquíes perdieron la vida en los combates.
El ejército informó que 178 soldados estadounidenses resultaron heridos en la ofensiva contra los guerrilleros en Falluja, que dio inicio a una serie de ataques y bombas en otras ciudades iraquíes.
El ejército estadounidense reconoce que los líderes de la insurgencia y los combatientes extranjeros pudieron haber escapado antes del ataque que comenzó el lunes a la noche, pero dijo que aquellos que han permanecido, están acorralados.
“No pueden ir hacia el norte porque es allí donde estamos. No pueden ir al oeste porque está el río Eufrates, y no pueden ir al este porque tenemos una gran presencia allí. Por lo tanto, están arrinconados en el sur”, dijo a Reuters el sargento del Cuerpo de Marines Roy Meek.
Los tripulantes de los tanques dijeron que llevaron a los rebeldes en la “ciudad fantasma” hacia una zona en el sur que según los estadounidenses es un bastión de combatientes extranjeros liderados por el aliado de Al Qaeda, Abu Musab al-Zarqawi.
Residentes informaron de combates e incursiones de aviones en partes de Falluja, incluidas en la zona este de Sinaa, Jolán, en el noroeste y en Martyrs en el sudeste.
La mezquita Haj Hussein de la ciudad fue destruida en una incursión aérea nocturna. El ejército estadounidense dijo que las mezquitas son objetivos legítimos si los insurgentes las utilizan con fines militares.
Se podía ver una columna de humo que provenía de una fábrica de hielo en el extremo del distrito de Jolán, después de que los rebeldes lanzaron tres cohetes contra las fuerzas estadounidenses que estaban allí, dijeron residentes.
La Sociedad de la Media Luna Roja iraquí pidió a las fuerzas norteamericanas y al gobierno interino iraquí que le dejen entregar alimentos, medicamentos y agua a los civiles que decidieron quedarse en Falluja, porque según la organización las condiciones en la ciudad son desastrosas.
Un portavoz militar de Estados Unidos dijo que la Media Luna Roja tenía permiso para ayudar a los refugiados alrededor de Falluja, pero no podía decir si había obtenido acceso a la ciudad misma.
La Media Luna Roja tiene siete equipos de médicos y trabajadores humanitarios, respaldados por camiones con comida, medicamentos y agua, listos para ir a cada uno de los distritos de Falluja cuando reciba el permiso.
