El Central Park de Nueva York. |
NUEVA YORK.- Una tormenta invernal depositó el domingo un manto blanco de nieve de más de 60 centímetros de profundidad en el noreste de Estados Unidos, dejando sin electricidad a miles de viviendas y provocando la cancelación de cientos de vuelos.
Vientos con ráfagas de hasta 65 kilómetros por hora impulsaron la nieve por los aires y amenazaron con inundar las costas de Nueva Inglaterra. En un hecho inusual, se vieron relámpagos mientras caía nieve en el área metropolitana de Nueva York.
Al terminar la mañana habían caído unos 57,9 centímetros de nieve en el Central Park de Nueva York, la segunda nevada más alta en la ciudad después de los 67,1 centímetros que cayeron en diciembre de 1947.
"Es una tormenta peligrosa", expresó el alcalde Michael Bloomberg mientras instaba a la población a que permaneciera en sus hogares.
Unas 2.500 máquinas quitanieves y para esparcir sal despejaban las calles junto con otros equipos especiales para derretir el hielo, dijeron las autoridades.
Cerca de 53,3 centímetros de nieve habían caído en Columbia, Maryland, entre Baltimore y Washington, y miles de casas de ese estado no tenían electricidad.
En Hartford, Connecticut, cayeron unos 48,3 centímetros de nieve y en los suburbios del norte y oeste de Filadelfia cerca de 45 centímetros, de acuerdo con el Servicio Nacional de Meteorología.
El radar mostraba nevadas desde el este de Virginia hasta Maine.
La posibilidad de inundaciones en las áreas costeras preocupaba a Massachusetts, dijo Peter Judge, portavoz de la Agencia de Manejo de Emergencias de ese estado.
Más de 80.000 clientes estaban sin electricidad en Maryland, según la portavoz de la empresa Baltimore Gas & Electric Co., Linda Foy. Dijo que podrían pasar al menos 24 horas hasta que el servicio eléctrico sea totalmente restaurado.
También estaban a oscuras miles de viviendas y negocios en Nueva Jersey, Long Island y Connecticut.
La mayoría de las aerolíneas canceló hasta el lunes todos los vuelos en el aeropuerto LaGuardia, expresó Steve Coleman, portavoz de la Autoridad de Puertos de Nueva York y Nueva Jersey. Cientos de vuelos fueron cancelados en los aeropuertos Kennedy y Newark.
La aerolínea Delta dijo que también canceló sus llegadas y partidas de Washington, Filadelfia, Boston, Baltimore, Providence, Rhode Island, y Hartford, Connecticut.
Las autoridades suspendieron asimismo todos los servicios de autobuses en Nueva Jersey, aunque la mayoría de los trenes continuaban operando.