SHANGAI.- Los divorciados de Shanghai desafiaron hoy al Día de los enamorados e inauguraron el primer club de corazones rotos de esa metrópoli, la mayor de China y situada en el delta del río Yangtsé.
El club, según relató hoy la agencia oficial china Xinhua, quiere "ayudar a los divorciados a celebrar el fin de matrimonios infelices y superar traumas pasados".
Un total de 135 divorciados, miembros fundadores del club, escogieron el 14 de febrero como fecha para crear la organización, con el fin de recordar que los amores tienen en general un comienzo feliz, pero no siempre un idéntico final.
"El club nace el Día de San Valentín porque es un acontecimiento feliz el escapar de un matrimonio muerto", señaló el presidente de la asociación, Shu Xin.
La nueva asociación también ofrecerá asesoramiento legal para los matrimonios que desean separarse, además de organizar encuentros de separados y diferentes celebraciones.
Shu señala que el club quiere tener socios de todo el mundo, y su meta es alcanzar el millón de miembros.
Divorcio en ascenso
En China el divorcio es todavía un hecho socialmente muy mal visto, especialmente en el caso de las mujeres, que en muchas ocasiones se encuentran con grandes dificultades para rehacer su vida y ser aceptadas, incluso a la hora de buscar trabajo.
Las estadísticas de Shanghai, la ciudad más cosmopolita y occidentalizada de China, muestran que el 40 por ciento de los separados sufren traumas psicológicos tras la separación, especialmente en los seis meses posteriores a la misma.
Según las estadísticas nacionales, 1,6 millones de parejas chinas se divorciaron en 2004, un 21 por ciento más que el año anterior, y se prevé que el aumento en 2005 haya sido incluso superior.