CIUDAD DEL VATICANO.- Benedicto XVI ha pedido a los cubanos "que confíen los unos en los otros, aunque haya diferencias de modo de pensar o creencias" y ha repetido las palabras de Juan Pablo II cuando visitó la isla en 1998, momento en el que pidió que "Cuba se abra al mundo y el mundo se abra a Cuba".
El Pontífice expresó este deseo en una carta que envió al presidente de la Conferencia Episcopal Cubana, el cardenal Jaime Lucas Ortega Alamillo, con motivo del XX Aniversario del Encuentro Nacional Eclesial de Cuba, misiva que fue hecha pública hoy por el Vaticano.
En su carta al cardenal de La Habana, el Papa se refirió a Cuba como la "querida nación" y expresó su cercanía espiritual con los obispos, sacerdotes y fieles católicos cubanos.
"Sí, (Dios) camina con todos los que viven en esa tierra, creyentes y no creyentes, los cercanos y los lejanos, los que siembran y los que desparraman, ya que todos están invitados a la fiesta de la vida que el Padre nos regala", añadió.
El Sumo Pontífice, Joseph Ratzinger añadió que "sería bueno recordar" las palabras que pronunció el fallecido Juan Pablo II durante su histórica visita a Cuba entre el 21 y 25 de enero de 1998: "Que Cuba se abra al mundo y el mundo se abra".
"Esa apertura exige examinar cómo abrir el corazón y el entendimiento a las cosas de Dios, cómo abrirse mutuamente quienes conviven, creyendo y confiando unos en otros, aunque haya diferencias de modos de pensar o creencias; y en fin, cómo abrirse al ámbito mundial, con los retos de sus posibilidades y sus dificultades al mismo tiempo", afirmó el Papa.