KABUL.- El caso contra el afgano converso al cristianismo, que había causado una seria controversia internacional por la posibilidad de que fuese condenado a la pena de muerte, fue desestimado por razones técnicas, dijo hoy el portavoz del Tribunal Supremo.
Abdul Rahman, un afgano de 41 años que se convirtió al cristianismo cuando tenía 25, estaba acusado de apostasía por "rechazar el Islam", delito que en este país se castiga con la ejecución.
Este caso había creado una fuerte controversia entre los principales aliados occidentales del Gobierno afgano, incluidos Estados Unidos, la Unión Europea (UE) y Canadá, y el Ejecutivo que había señalado que buscaba una solución "satisfactoria para todos".
El caso volverá a la fiscalía
El portavoz del Supremo afgano, Abdul Wakil Omari, informó que el caso fue desestimado "por fallos técnicos" y dijo que ha sido devuelto a la fiscalía por si tiene intención de volver a construir una acusación sobre bases más sólidas.
Según Omari, tres testigos -todos ellos de la familia del acusado- han asegurado que Rahman tiene problemas mentales y además se cree que, después de pasar nueve años en Alemania, puede tener la nacionalidad germana, por lo que no podría ser condenado.
Ahora, teóricamente, podría volver a plantearse una nueva acusación contra él, si la fiscalía encuentra razones suficientes, aunque lo previsible es que no ocurra y que Abdul Rahman sea liberado próximamente.
El hombre se convirtió al cristianismo hace dieciséis años, tras trabajar en una organización humanitaria que ayudaba a refugiados afganos en Pakistán, y fue detenido en febrero pasado a instancias de la policía, después de que su familia lo denunciase por una disputa por la custodia de sus dos hijas.