QUITO.- El volcán Tungurahua, en el centro andino de Ecuador, registró una alta actividad sísmica en las últimas 24 horas, con más de 130 explosiones, de intensidades bajas y moderadas, informó hoy el Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional.
Varias explosiones generaron ondas acústicas, a manera de cañonazos, que pudieron ser escuchadas a 20 kilómetros de distancia, aunque las más fuertes también se oyeron en la ciudad de Ambato, a casi 40 kilómetros al oeste.
El Tungurahua, cuyo proceso eruptivo empezó en 1999, ha mantenido períodos de intensa actividad, que los intercala con lapsos de relativa calma.
Los científicos que vigilan el comportamiento de la montaña, de 5.029 metros de altura, calculan que la erupción del coloso durará meses o años, y no descartan que en algún momento pueda generar una gran explosión.
Las frecuentes exhalaciones del Tungurahua han generado columnas de vapor, ceniza y gases magmáticos, como nubes, que han ascendido a más de dos kilómetros de altura sobre el cráter.
Además, las explosiones, conocidas por los científicos como "estrombolianas", por el Stromboli italiano, se caracterizan por la expulsión de rocas incandescentes, que se elevan unos 100 metros sobre el cráter, para caer luego por los flancos de la montaña.
Una parte de la ceniza emanada por el volcán ha caído en las localidades vecinas de Cusúa y Choglontus, señala el informe del Instituto Geofísico, que además precisa que la montaña ha exhalado en las últimas horas unas 80 toneladas de dióxido de azufre.
Las autoridades ecuatorianas mantienen en la zona una "alerta amarilla", de precaución, que podría cambiar a "roja", de evacuación inmediata, si se registra un aumento peligroso en su actividad.