SAO PAULO.- Las operadoras brasileñas de telefonía móvil bloquearán durante veinte días la señal en seis áreas del estado de Sao Paulo para aislar a la mafia de presos Primer Comando de la Capital (PCC), responsable de la violencia que ha dejado al menos 152 muertos, informaron hoy las autoridades.
El bloqueo de las comunicaciones fue ordenado por el juez Alex Tadeu Monteiro Zilenovski ante la constatación de que los cabecillas del PCC usan teléfonos celulares para ordenar desde la prisión ataques a la policía y coordinar rebeliones simultáneas de presos, como ocurrió en días recientes.
"La inhibición de las comunicaciones, excepcional y temporal, será inicialmente por el plazo de 20 días, o hasta que la cuestión sea definitivamente resuelta por otra medida jurisdiccional o legal", señaló la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel) en un comunicado.
La restricción afectará a regiones de los municipios paulistas de Avaré, Presidente Venceslau, Iaras, Araraquara, Sao Vicente y Franco da Rocha, en los que existen cárceles que albergan a presos del PCC.
El bloqueo debe comenzar mañana y será coordinado por la Anatel con el fin de que el resto de la población no sea muy afectada por la medida.
La policía insiste en que las operadoras deben disponer de recursos técnicos para bloquear la señal de los teléfonos móviles en las prisiones, mientras que las empresas consideran que son las autoridades las que deben impedir que los celulares lleguen a manos de los presos.
Los teléfonos móviles son llevados a las cárceles por familiares de los reclusos, abogados y hasta por los propios guardianes, sin que las autoridades hayan encontrado la forma para impedir ese tráfico de aparatos.
Un preso admitió recientemente en una entrevista telefónica con un programa de televisión que algunos guardias les consiguen aparatos móviles por un precio que oscila entre 200 y 300 reales (entre 92 y 138 dólares).
El jefe del PCC, Marcos Willians Herba Camacho "Marcola", que la semana pasada fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad de Presidente Bernardes, en el oeste del estado, ha sido filmado por cámaras de televisión hablando por un teléfono móvil, al igual que otros reclusos.
El ministro de Justicia, Marcio Thomaz Bastos, se reunió hoy con el gobernador de Sao Paulo, Claudio Lembo, y le ofreció ayuda del gobierno nacional para trasladar a "Marcola" para una cárcel en otro estado brasileño con el fin de aislarlo de sus cómplices y desmantelar el PCC.
El pasado lunes Bastos también ofreció a Lembo un refuerzo militar y policial para enfrentar al crimen organizado, pero el gobernador no aceptó esa ayuda del gobierno nacional porque, en su opinión, los 130.000 policías de Sao Paulo pueden resolver la situación.
En Brasil las policías Militar y Civil están subordinadas a los gobiernos regionales, mientras que las Fuerzas Armadas y la Policía Federal tienen jurisdicción nacional.