WASHINGTON.- El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció hoy que su administración planea el cierre de la prisión de Guantánamo, pero dijo que los detenidos más peligrosos deberán ser juzgados.
Durante una rueda de prensa conjunta en Camp David con el Primer Ministro danés Aders Fogh Rasmussen, Bush declaró que está trabajando con otros países para ver si podían encargarse de algunos de los arrestados.
El Mandatario estadounidense señaló que Rasmussen, un estrecho aliado de Estados Unidos que apoyó a Bush con sus tropas en Irak y Afganistán, había contribuido a aumentar sus preocupaciones sobre la controvertida prisión en Cuba, donde están detenidos 500 sospechosos de la "guerra contra el terror".
"Le he asegurado que nos gustaría acabar con Guantánamo", dijo Bush. "Queremos vaciarla".
Bush señaló que su Gobierno está esperando una decisión del Tribunal Supremo sobre si los tribunales militares pueden procesar a la docena de detenidos que han sido acusados. "Algunos de ellos podrían causar grandes daños a los ciudadanos estadounidenses y de otros países si salieran a la calle", dijo.
Muerte de Al Zarqawi
La reunión en Camp David se produce dos días después de que las fuerzas estadounidenses acabaran con la vida del líder de Al Qaeda en Irak, Abu Mussab Al Zarqawi, a quien se atribuyen algunos de los más sangrientos ataques contra civiles y las fuerzas de coalición.
Bush declaró estar "emocionado" por la muerte de Al Zarqawi, pero hizo hincapié en que el desafío sigue siendo combatir la insurgencia y formar a las fuerzas de seguridad iraquíes.
"No quiero que los estadounidenses piensen que una guerra se gana con la muerte de una persona (...) Todavía tenemos mucho que hacer", subrayó.
Respecto a la investigación que se está llevando a cabo sobre la presunta matanza de 24 civiles iraquíes en Haditha por parte de la marina estadounidense, Rasmussen declaró: "Cuando ocurren acontecimientos inaceptables como en Abu Ghoreib y se hacen acusaciones sobre actos tan horribles como los de Haditha, no se trata sólo de una tragedia para las víctimas", sino que "perjudica nuestros propios esfuerzos y supone una ofensa contra nuestros valores".
"El Presidente me ha asegurado que se investigarán todas las acusaciones y que, si se ha actuado mal, los responsables serán juzgados", añadió.
Dinamarca tiene desplegadas 530 soldados en Irak y 360 en Afganistán.