COPENHAGUE.- La polémica por la repetida publicación de las caricaturas de Mahoma desató una nueva crisis diplomática entre Dinamarca e Irán: el Folketing (parlamento) danés anunció hoy la suspensión de la visita oficial que su Comité de Relaciones Exteriores planeaba hacer a Teherán.
Los diputados daneses reaccionaron así a las exigencias iraníes para que el gobierno de Copenhague tome medidas contra la publicación de las viñetas originalmente aparecidas en el periódico "Jyllands- Posten". Irán había exigido al Comité que se distancie de la publicación antes de la visita, extremo que los daneses rechazaron.
La publicación de las caricaturas en varios medios daneses fue una reacción a los planes para asesinar a uno de sus autores descubiertos por la policía. El gobierno iraní convocó al embajador danés en Teherán para protestar oficialmente contra esta "nueva ofensa".
Tras su primera aparición a principios de 2006, las caricaturas desataron violentas protestas frente a la legación diplomática danesa en Teherán, que fueron toleradas por las fuerzas locales de seguridad.