Las migrañas también afectan el sueño normal de los niños.
Archivo El Mercurio
WASHINGTON.- Las migrañas aumentan en las mujeres el riesgo de males cardiovasculares y apoplejías, y también afectan el sueño normal de los niños, según dos estudios presentados hoy ante la reunión anual de la Academia Americana de Neurología, que se realiza en Chicago.
Un tercer informe señaló que las personas que abusan del consumo de barbitúricos y opioides para reducir los efectos de la migraña enfrentan la posibilidad de que ésta se convierta en un problema crónico.
Las migrañas son intensos dolores de cabeza que generalmente durante entre 6 y 48 horas y son acompañadas por náuseas y vómitos.
Una de las investigaciones a 27.798 mujeres profesionales de la salud mayores de 45 años en EE.UU. reveló que las que sufrían al menos un episodio semanal de migraña corrían un peligro tres veces mayor de sufrir un ataque apoplético.
En los casos de mujeres con migraña menos de una vez al mes, el peligro de sufrir un ataque al corazón aumentaba una y media veces, indicó el estudio.
Según Tobías Kurth, médico del Hospital Brigham para Mujeres y profesor de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, los resultados del estudio sugieren que la frecuencia de las migrañas puede indicar un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, especialmente de apoplejías isquémicas (falta de irrigación sanguínea).
Sin embargo, Kurth admitió que se necesitarían estudios más profundos para determinar si la prevención de las migrañas reduce el peligro de las enfermedades cardiovasculares.
Por otra parte, un estudio realizado por científicos de la Universidad Temple de Filadelfia manifestó que el peligro de trastornos del sueño, entre ellos de respiración (conocidos como apnea), se duplica cuando los niños sufren migrañas.
Esa conclusión fue extraía de una prueba realizada a 90 niños que tenían problemas de sueño y dolores de cabeza.
Los científicos los sometieron a un polisomnograma, que es una prueba en el sueño durante la que se observan el cerebro, los movimientos oculares, el ritmo cardíaco y la respiración. De los participantes, 60 sufrían migrañas y 30 dolores de cabeza crónicos o de otro tipo.
El estudio determinó que los niños con migrañas enfrentaban el doble de peligro de sufrir apnea en comparación con otros niños. Se constataron problemas de respiración durante el sueño en un 56 por ciento de los niños con migrañas en comparación con un 30 por ciento en los que no sufrían ese trastorno.
La migraña también fue vinculada a la falta de sueño total, a un tiempo más prolongado para quedarse dormido, así como a una etapa más corta en la que la mayoría de los sueños pueden recordarse, señalaron los científicos.
"Los problemas del sueño pueden exacerbar los que causa la migraña en la salud de los niños y perjudicar su rendimiento escolar", dijo Martina Vendrame, autora del estudio. "Es necesario que los padres y los médicos estén alertas ante la probabilidad de trastornos en el sueño de niños con migraña y procuren prevención y tratamientos adecuados", agregó.
El tercer estudio realizado a 24.000 personas en EE.UU. determinó que quienes consumen medicamentos con barbitúricos u opioides durante ocho días al mes duplican la probabilidad de sufrir migrañas crónicas un año después, en comparación con quienes no consumen ese tipo de medicinas.
"La gente que usa remedios que contengan barbitúricos y opioides, aunque sea siete u ocho días al mes, parecen aumentar de manera considerable el riesgo de una progresión de la migraña", dijo Marcelo Bibal, del Colegio de Medicina Albert Einstein, de Nueva York.
"Deberían aplicarse límites estrictos al consumo de estos medicamentos en personas con migrañas para impedir que estas sean más frecuentes y más dolorosas", señaló.