LA HABANA.- El ex presidente cubano Fidel Castro elogió en otro de sus artículos el mensaje en favor de la paz que emitió Benedicto XVI en su visita a Estados Unidos y ponderó incluso su prestancia física.
Castro, retirado de sus cargos de presidente y Comandante en Jefe desde febrero a causa de su salud, dedicó parte de su comentario a las elecciones en Paraguay, que acaba de ganar Fernando Lugo, a quien describió como un "antiguo Obispo católico (que) cuenta con la mayoría abrumadora del pueblo".
En su análisis, subrayó que "Benedicto XVI regresa hoy a Roma. Los bellos e impresionantes cantos han cesado en los templos. Ahora se continuará escuchando el odioso e incesante estampido de las armas".Al describir la estancia del Papa en Estados Unidos y su encuentro con el Presidente norteamericano, George W. Bush,
Castro dijo que "el jefe del imperio no se atrevería a exigir al Estado del Vaticano nueva constitución y elecciones libres como él las concibe para Cuba".
"Como líder de una iglesia en medio de la guerra desatada por Estados Unidos contra los musulmanes, su mensaje fue ecuménico y favorable a la paz", consideró el ex presidente.
Castro, bajo el título genérico "Reflexiones del compañero Fidel", escribió que "no es fácil desentrañar el pensamiento del Vaticano sobre los espinosos temas que se abordan en un mundo donde el Presidente de Estados Unidos y sus aliados ricos y desarrollados han impuesto una guerra sangrienta contra la cultura y la religión de más de mil millones de personas en nombre de la lucha contra el terrorismo."
En esa guerra, consideró, "impera la tortura, el saqueo y la conquista por la fuerza de los hidrocarburos y las materias primas, lo que expresó el Papa es la antítesis de la política de brutalidad y fuerza que aplica el cantor de 'Las Mañanitas'", refiriéndose a Bush, quien celebró el cumpleaños del Papa cantándole esa composición tradicional mexicana.
En otra observación acerca de la visita papal a Estados Unidos, Castro expuso que Bush "lo recibió en la Base Andrews de la Fuerza Aérea norteamericana, gesto inusual"."Benedicto XVI, a lo largo de su actividad como Obispo alemán, fue conservador y alérgico a los cambios en la política social y en las normas internas que rigen su iglesia. La gran prensa de Estados Unidos inicialmente fue implacable, a partir de las indisciplinas contra las normas establecidas para los creyentes, calificando a la Iglesia Católica como religión decadente", sostuvo.