MONTERREY.- Catorce personas fallecieron en lo que va de este sábado, entre ellas cuatro policías, todos ellos víctimas de disparos al norte y al centro de México, informaron las autoridades.
En la zona metropolitana de Monterrey, al norte del país, dos policías municipales fallecieron en la madrugada durante un enfrentamiento con un grupo de delincuentes, uno de los cuales también murió.
"Hubo una persecución, un vehículo particular con cuatro hombres armados se emparejó a la patrulla donde viajaban los dos oficiales y empezó un tiroteo durante seis calles que terminó con el choque de la patrulla", dijo una fuente de la Agencia Estatal de Investigaciones.
Agregó que uno de los agentes murió en el lugar y otro durante su traslado al hospital. Junto a la patrulla quedó el automóvil de los delincuentes y al lado la otra víctima, mientras los otros escaparon por las calles cercanas.
Los hechos se registraron en un suburbio popular y densamente poblado del municipio de Apodaca, que forma parte de la zona metropolitana de Monterrey, capital del estado de Nuevo León.
En la convulsa Ciudad Juárez, en el también norteño estado de Chihuahua y colindante con Estados Unidos, la fiscalía reportó el sábado el hallazgo de dos hombres sin vida con balazos en la cabeza y signos de tortura.
Al sur del estado, en la localidad de Parral, fueron localizados otros tres cuerpos en un tramo de carretera, con un mensaje que refiere, al parecer, a disputas entre grupos criminales. Y en la capital estatal, Chihuahua, dos policías fueron asesinados por individuos que les dispararon desde un vehículo cuando vigilaban los alrededores de un hospital.
En otro suceso en el municipio de Ecapatec, en el estado de México, al centro del país, fueron asesinados en la madrugada cuatro hombres por un grupo de desconocidos que les dispararon.
Los cuerpos de las víctimas, que no han sido identificadas, quedaron distantes entre sí, pues habrían intentado escapar del ataque.
Las pugnas entre los carteles del narcotráfico y la ofensiva militar contra las organizaciones criminales dejaron en México en los últimos cinco años más de 50.000 muertos.
