El potente ''Liaoning'' fue bautizado en honor a la provincia china del mismo nombre.
AFPBEIJING.- Tras largos trabajos de reconstrucción y adaptación, China anunció la entrada en servicio de su primer portaaviones, justo en el momento en que arrecian las tensiones con Japón y Taiwán por las disputadas islas de Diaoyu/Senkaku.
El buque, bautizado "Liaoning", es la antigua nave soviética "Varyag", comprada a Ucrania en 1989. Tiene 300 metros de eslora y fue dotado de una nueva planta motriz, además de armamento modernizado. Contaría con capacidad para albergar unos 26 aviones de ala fija y 24 helicópteros.
Según autoridades, aunque el portaaviones ya está en operaciones, no embarcará aeronaves por el momento.
El anuncio oficial del Ministerio de Defensa chino, largamente esperado, no está directamente ligado a la escalada vinculada al diminuto archipiélago, aunque llamó la atención la coincidencia de fechas.
La puesta a punto de la poderosa nave respalda las ambiciones de la potencia asiática para contar con una armada con capacidad para operar en los océanos, lejos de sus aguas territoriales.
Paralelamente, la industria aeronáutica china trabaja en el desarrollo de al menos un tipo de avión embarcado, basado en el potente caza Sukhoi Su-33 diseñado en Rusia.
Tener un portaaviones era un viejo anhelo del Gobierno chino, que planteaba la posibilidad de contar con este tipo de buques, considerados la culminación tecnológica de una Armada moderna, desde hace decenios.
El gigante asiático era el único miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU que no contaba con este estratégico tipo de navío.
Hasta ahora, los únicos países de Asia que contaban con este tipo de nave de combate eran India y Tailandia.