Gobierno francés quiere reprimir penalmente el matrimonio forzado

PARÍS.- El Gobierno francés anunció que quiere reprimir penalmente ciertas formas de violencia ejercidas contra las mujeres, como el matrimonio forzado, en el marco de un plan global en favor de la igualdad de los géneros presentado este viernes.

Las bodas obligadas son actualmente una infracción, pero no un delito penal, y los pocos casos que llegan a los tribunales lo son bajo otros cargos, como secuestro o violencia.

Los matrimonios "no consentidos", que conciernen esencialmente las mujeres inmigrantes o hijas de inmigrantes originarias del Magreb, de Turquía y de África subsahariana, han disminuido notablemente en Francia, según una investigación publicada el año pasado.

Ese estudio indica que 22% de las mujeres inmigrantes de entre 51 y 60 años se casaron en el marco de un "matrimonio negociado" por sus familias. La cifra descienden a 9% para las más jóvenes (entre 26 y 30 años) y a 4% entre las hijas de inmigrantes de la misma edad.

El plan del Gobierno en favor de la igualdad entre hombres y mujeres incluye medidas que conciernen la escuela, los medios de información, las empresas, la salud y la prevención de la violencia de género.

"La promoción de los derechos de las mujeres es esencial para nuestra sociedad, y la política de igualdad entre los sexos debe ser un pilar del nuevo modelo francés", declaró el Primer Ministro Jean-Marc Ayrault.