WASHINGTON.- Un supuesto líder de Al Qaeda capturado este mes en Libia por fuerzas especiales de Estados Unidos fue trasladado al país norteamericano para enfrentar acusaciones de terrorismo, dijeron el lunes un grupo de funcionarios.
El ciudadano libio Nazih al-Ragye, más conocido como Abu Anas al-Liby, es sospechoso de provocar las explosiones ocurridas en las embajadas de Estados Unidos en Kenia y Tanzania en 1998, en las que murieron 224 civiles.
El sospechoso fue capturado por el escuadrón Fuerza Delta del Ejército de Estados Unidos en Trípoli el 5 de octubre y trasladado a un barco de la marina en el mar Mediterráneo, donde fue interrogado por un equipo de especialistas.
Durante el fin de semana fue enviado a Estados Unidos y entregado a autoridades civiles.
Actualmente está bajo custodia de funcionarios del área de Nueva York, informó Preet Bharara, fiscal federal jefe de Manhattan. Se espera que al-Liby comparezca ante un juez el martes, dijo Bharara en un comunicado.
En el 2001 se presentó una acusación criminal contra al-Liby y otros supuestos militantes por los atentados contra la embajada.
Funcionarios estadounidenses dijeron inicialmente que esperaban que al-Liby fuera retenido a bordo del buque naval por semanas o meses para interrogatorios de un equipo de seguridad de Estados Unidos conocido como Grupo para Interrogatorios de Detenidos de Alto Valor (HIG, por sus siglas en inglés).
Pero un funcionario de seguridad dijo que, poco después de su captura, quedó claro para los interrogadores que al-Liby sufría de varias condiciones de salud preexistentes.
El funcionario dijo que su traslado a la custodia de autoridades civiles en Estados Unidos fue necesario porque las instalaciones médicas a bordo del buque militar no eran lo suficientemente sofisticadas para proveer un tratamiento apropiado.
La esposa de al-Liby ha dicho en entrevistas con la prensa que el sospechoso sufre de Hepatitis C.
No se sabía de inmediato si al-Liby cooperó con las autoridades de seguridad de Estados Unidos o si les entregó datos de inteligencia de algún valor. El sospechoso libio estuvo bajo custodia militar por alrededor de 10 días.
