DUBLIN.- La capital de Irlanda despertó el viernes con olor a carne frita mientras los admiradores del autor de "Ulises", James Joyce, se confundían con los turistas para un día de celebración sobre su vida.
El Día de Bloom, el aniversario de la fecha en la que se ambienta "Ulises", se ha transformado en un acontecimiento anual, comenzando con un desayuno con "los órganos internos de animales y aves", como lo disfruta el héroe de la novela, Leopoldo Bloom.
"Ulises", ampliamente considerado uno de los textos clave del siglo, ha generado una próspera mini industria en la ciudad en la que se desarrolla, originando museos y giras literarias durante todo el año, y atrayendo a admiradores de Joyce de todo el mundo.
En el Centro James Joyce de Dublín, unos 600 visitantes, incluso la primera ministra Bertie Ahern, se sentaron a desayunar salchichas, tocino y huevos como preámbulo de presentaciones de obras teatrales callejeras, charlas y recorridos con guías.
"Espero ver unos 2.000 visitantes aquí durante el curso del día, muchos de ellos vestidos al estilo del rey Eduardo o de Joyce. Otros miles participarán en otros actos en otras partes de la ciudad", dijo a Reuters la portavoz del centro.
Contó que unas 30.000 personas de 100 países pasaron por el centro el año pasado, muchas de ellas como parte de recorridos educativos de Estados Unidos, Gran Bretaña y Japón.