BUENOS AIRES.- Con la presencia del portugués Antonio Lobo Antunes, el inglés David Lodge, el mexicano Carlos Monsivais, los españoles Arturo Pérez Reverte y Fernando Savater, el chileno Antonio Skarmeta y la colombiana Laura Restrepo, se inauguró hoy la tradicional Feria Internacional del Libro de Buenos Aires en su trigésima edición.
El vamos a la muestra fue dado oficialmente por el escritor argentino Abelardo Castillo y con la presencia de los ministros de Educación, Daniel Filmus, de Salud, Ginés González García, y el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Anibal Ibarra, entre otras autoridades.
Castillo en su discurso se preguntó sobre el sentido de la lectura "cuando hay chicos que no pueden comer" y recordó las primeras ediciones de la Feria del Libro organizadas durante la dictadura (1976-1983), cuando los censores militares "venían a levantar los stands".
El escritor argentino fue director de las míticas revistas culturales "El escarabajo de oro" y "El ornitorrinco" que se editaron durante la dictadura.
Carlos Alberto Pazos, presidente de la Fundación El Libro -organizadora de la muestra- afirmó durante la ceremonia inaugural que "la industria editorial se está recuperando" luego de la crisis que atravesó el país entre diciembre de 2001 y fines del 2002, cuando la publicación de libros se redujo a sus más bajos niveles históricos.
Sin embargo, Pazos criticó que la recuperación del sector podría frustrarse "porque actualmente no tenemos un apoyo financiero como siempre lo hubo".
"Por ejemplo, en un insumo fundamental para el sector, como es el papel, tiene precios exorbitantes debido a aumentos que entendemos injustificados", se quejó el presidente de la Fundación El Libro.
El directivo destacó también que el libro "es un ariete de la libertad y una herramienta insustituible de la educación" y también "lo opuesto a la censura, a la limitación en la expresión de las ideas y de los ideales".
La primera Feria del Libro de 1975 se organizó en una plaza pública con la presencia de 116 expositores que ocuparon 7.500 metros cuadrados y fue visitada por 140 mil espectadores, una cifra que superó, por lejos, las expectativas de los organizadores.
Este año la Feria del Libro ocupará 35.500 metros cuadrados, reunirá la cifra record de 1.384 expositores -38 serán países extranjeros- y se realizarán un millar de actos culturales.
La cantidad de asistentes promedio de la Feria del Libro supera el millón de personas por edición.
