SANTA MARIA, California, EE.UU.- La madre del adolescente de 15 años que acusa al cantante pop Michael Jackson de abuso sexual se presentó hoy en el estrado de testigos por primera vez.
Los fiscales quieren que su testigo "estrella", la madre del joven, respalde las acusaciones contra Jackson, de 46 años, de que el músico presionó a la familia y los mantuvo retenidos contra su voluntad en su rancho Neverland.
Se espera que los abogados de Jackson retraten a la mujer como una mentirosa en busca de dinero que inventó las acusaciones contra el cantante.
La mujer se negó a responder las preguntas sobre su supuesto fraude a la asistencia social invocando la Quinta Enmienda, una disposición constitucional que permite que los testigos de la corte puedan negarse a contestar preguntas que podrían comprometer su propio interés.
El juez en el tribunal de Santa Maria, estado norteamericano de California, permitió el alegato, lo que implica que ella podrá evitar las interrogantes de los abogados defensores de Jackson sobre los presuntos pagos ilegales de la asistencia social del gobierno cobrados por la mujer. La defensa iba a utilizar el tema para erosionar la credibilidad como testigo contra el músico.
El padrastro del joven acusador testificó el martes en la corte que la madre del adolescente parecía asustada y lloraba en los llamados que hizo desde el rancho Neverland.
El testigo añadió que luego de que por televisión se viera un polémico documental que mostraba a Jackson de la mano con el niño entonces de 13 años y enfermo de cáncer, el cantante obligó a la familia a quedarse en su rancho y a grabar en un video una declaración favorable. Según la fiscalía, durante ese tiempo el menor fue objeto de abusos sexuales.
La defensa de Jackson insiste por el contrario en que la familia estaba voluntariamente en Neverland y que se podía ir por propia decisión.
Con los testimonios de la madre y el padrastro del joven, la fiscalía se focalizó nuevamente en la presunta víctima. En la última semana intentó establecer un patrón en el comportamiento de Jackson al convocar a testigos que testificaron sobre otros cinco potenciales casos de abuso de menores.
Jackson, de 46 años, está acusado de haber abusado sexualmente en 2003 de un niño de ese entonces 13 años, por lo que podría ser condenado a hasta 20 años de prisión. Además de los cargos por abuso, el cantante también está acusado de secuestro. El imputado niega todas las acusaciones.