PRAGA.- Un grupo de científicos checos descubrió recientemente en Bolivia, al sudeste del lago Titicaca, las ruinas de una ciudad inca situada a mayor altitud que las que se conocían hasta ahora, dijo el jefe de la expedición, Ivo Bartecek.
"Compuesta por varios sitios, esta ciudad se extiende sobre una superficie que supera los 10 kilómetros cuadrados, a una altitud de entre 3.000 y 4.400 metros", precisó el profesor Bartecek, decano de la facultad de Filosofía de la Universidad de Olomuc (este) y eminente especialista checo en estudios iberoamericanos.
"A mayor altitud, no hay más que glaciares", agregó el experto, quien subrayó que esta ciudad tenía "una importancia extratégica y religiosa extraordinaria".
Entre las ruinas de la ciudad se incluyen vestigios de construcciones consagradas a la práctica del culto al sol, pero la finalidad de algunas otras partes del complejo deberán ser determinadas por los arqueólogos, agregó.
"Algunos segmentos del recinto eran naturalmente conocidos por los indígenas. Pero la novedad es que estos segmentos forman un complejo de más de 10 kilómetros cuadrados, por lo que el hallazgo amplía nuestros conocimientos sobre la cultura incaica y preincaica", continuó el jefe de la expedición, bautizada "Titicaca 2005".
"Para nuestro viaje, elegimos los meses de invierno, cuando la vegetación es menos abundante, lo que nos permitió 'leer' mejor en ese paisaje", afirmó Bartecek.
Según el profesor, "la ciudad está dominada por un conjunto urbanístico con un centenar de cimientos de edificios de plano circular o cuadrado, denominado 'Chilata Collo' por la población local. Está situado sobre una pendiente abrupta expuesta al sol matinal, por encima del lago Chilata, venerado por los agricultores".
La expedición duró tres semanas
Organizada por la cátedra de historia de la Universidad de Olomuc y compuesta por dos científicos y dos documentalistas, la expedición pasó cerca de tres semanas en la región, bajo los picos de Ancohuma e Illampu.
Los cuatro investigadores checos se beneficiaron de una importante ayuda de los pobladores locales. "Se convirtieron en verdaderos colegas y amigos", afirmó Bartecek.
"Nuestra tarea prioritaria era probar la hipótesis de la existencia en esa región de un sitio de las culturas incaica y preincaica situado a la mayor altitud posible sobre el macizo andino. Es allí, en los alrededores del lago Titicaca, que se encuentra la cuna de las civilizaciones sudamericanas, anteriormente dominadas por las civilizaciones de Tihuanaco y Chiripa", agregó.
El hallazgo del complejo ofrece una "noción absolutamente nueva", según Bartecek, que ya ha participado en nueve expediciones tras las huellas de las culturas incaicas y preincaicas.
La expedición de la Universidad de Olomuc realizó sobre el terreno las investigaciones histórico-topográficas necesarias y realizó una amplia documentación en fotografías y video, que actualmente está siendo sometida a un análisis detallado.