LIMA.- La ex policía peruana Julia Beatriz Escudero volvió a denunciar a la cantante Isabel Pantoja por "tráfico de influencias en adopción de menores y asociación ilícita", motivo por el que la Fiscalía de Perú ha reabierto el proceso, informó a Efe un portavoz de este organismo judicial.
La reapertura del proceso se produce dos años después de que la fiscal anticorrupción Juana Meza archivara "de forma definitiva" el caso "al no hallar ningún indicio probatorio de delito contra la tonadillera española".
Pero el fiscal Jorge Chávez ha retomado el caso al considerar que "hay nuevos indicios", tras la denuncia presentada en 2005 por la ex policía Julia Beatriz Escudero, quien está en la actualidad en busca y captura por múltiples procesos de estafa.
El portavoz de la Fiscalía, que prefirió guardar el anonimato y rehusó comentar cuáles son los nuevos indicios, explicó a Efe que al parecer la ex policía fue guardaespaldas de la cantante durante su estancia en Lima y testigo de pagos irregulares realizados para acelerar el trámite de la adopción de su hija.
Agregó que la Fiscalía ha enviado a través del Ministerio de Relaciones Exteriores una comisión rogatoria a España para que Isabel Pantoja "haga uso de su derecho a la defensa frente a las nuevas imputaciones".
Durante el anterior proceso llevado a cabo entre 2003 y 2004, un total de quince testigos prestaron declaración, pero de ellos sólo la ex policía Escudero la acusó de soborno.
Por eso, la Justicia consideró que no había lugar para formalizar una denuncia penal contra María Isabel Pantoja Martín y el ex asesor presidencial Vladimiro Montesinos Torres por "la comisión del delito contra la administración pública y corrupción de funcionarios en agravio del Estado".
En aquel entonces, se acusó a la cantante de haber sobornado a Montesinos para agilizar el proceso de adopción durante el gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000).
Montesinos, condenado por varios delitos de corrupción, fue el hombre fuerte del régimen y siempre negó haber recibido algún pago de Isabel Pantoja, además de reiterar que nunca conoció a la artista.
La cantante, por su lado, también negó ante la Justicia española los hechos que se la imputaban y afirmó que todo el dinero desembolsado durante el proceso de adopción fue para pagar los honorarios de los abogados y los gastos de notaría.
