VIÑA DEL MAR.- Tras el bajón de calidad que sufrió la tercera jornada del Festival con las pistas grabadas de Leonardo Farkas, tenía que ocurrir un milagro para salvar lo que quedaba del evento. Y ese milagro se llamó “Dinamita Show”.
El dúo formado por el Indio (Mauricio Medina) y el Flaco (Paúl Vásquez) volvió a la Quinta Vergara tras haber conocido el éxito y, posteriormente, el cuasi olvido. Y, en el caso de Vásquez, haber pasado por complicados momentos personales.
La última vez que habían estado en Viña fue en 2001, donde recibieron un apoyo más compasivo que de premio como ocurrió con la rutina de esta noche, que no dejó de sacar carcajadas.
Es cierto que la estructura de su show no ha cambiado mucho en más de dos décadas. El Flaco se desata en el escenario y el Indio pone la cuota de irónica seriedad. Sólo actualizaron sus chistes, como cuando le preguntaban al "monstruo": ¿"Qué le dijo a Impuestos Internos Mauricio Israel antes de irse del país?: “Te la vi... ¡bieeeen!”.
El público celebró las imitaciones infantiles de Vásquez, como su parodia a Rafaella Carra, su baile en el caño y las contradicciones del lenguaje; también, la descarnada forma en que retrató con el Indio la evolución amorosa de los matrimonios.
En su regreso, los "Dinamita Show" demostraron que su humor tiene un sello, y que no causan gracia cuando se alejan de él. Ya son un clásico. Su peor error fue haberse separado. Quizás llevarse la Gaviota de Plata fue demasiado regalo, pero tampoco merecían irse bajo una lluvia de pifias.