Bloom dice que su hijo es ''una bendición''para él y Kerr.
La SegundaMADRID.- El actor británico Orlando Bloom asegura que desde el nacimiento de su hijo con la modelo Miranda Kerr, se siente más atractivo. "Ser padre te hace más sexy", asegura.
"Al tener un hijo la seducción no desaparece. Tener un hijo me ha centrado en la dirección correcta, porque las cosas pequeñas han perdido importancia. Es el papel más desafiante que he hecho hasta la fecha y me siento bendecido", explica este actor que, aunque no quería hablar de su vida personal, no ha podido evitar transmitir su entusiasmo de padre primerizo.
A sus 34 años, Bloom dilata todavía su calidad de ídolo juvenil y prepara ya dos papeles para arrasar: el de duque de Buckingham en la nueva versión de "Los tres mosqueteros" -"un personaje distinto, que no llega a ser villano pero sí es como un niño grande", dice- y su vuelta al mundo élfico en "El Hobbit", película de la que no dice ni palabra. "No me dejan", se justifica.
Bloom reconoce que quiso ser actor para vivir distintas vidas y adoptar diferentes imágenes: saltó a la fama con el rubio platino de Légolas de "El señor de los anillos", luego se afilió al look "dirty-chic" del barco pirata de Jack Sparrow y ahora se prepara para la Francia absolutista de "Los tres mosqueteros".
Ahora que se ha bajado del barco de Johnny Depp para la cuarta entrega de "Piratas del Caribe" se enrola en tripulaciones más independientes, como el debut en la dirección de Mark Ruffalo "Sympathy for Delicious".
"Me encanta el cine independiente, son las películas que me gusta ver cuando voy al cine. Y el proceso de trabajar en ellas tiene mucha más libertad y menos presión", reflexiona.