The Drums toca en el Tech Stage el domingo a las 18:30 horas.
Thedrums.comSANTIAGO.- Kanye West, The Killers, Jane's Addiction o James. Ésos y otros nombres de los escenarios principales son los que han acaparado la mayoría de los comentarios y etiquetas de "favorito", en los días previos a Lollapalooza.
Sin embargo, entre quienes se han dado el trabajo de descubrir a los casi sesenta artistas que pasarán por los distintos sectores del evento, no son pocas las sorpresas que ya se tornan indispensables.
Una de ellas es The Drums, el grupo neoyorquino que, en rigor, no es ninguna revelación: Su disco homónimo fue uno de los preferidos en el público indie de diversas latitudes, y Chile no escapó a ello.
"En nuestro Facebook tenemos muchos fans chilenos que nos han estado pidiendo que vayamos desde que empezamos, y ésa es otra razón por la que no podemos esperar. Pareciera que harta gente quiere que vayamos desde hace bastante tiempo, y es una pena que no lo hayamos hecho antes, así que nos vamos a esforzar muchísimo", dice Jonathan Pierce, vocalista del grupo que el domingo se presentará en La Cúpula del Parque O'Higgins, a las 18:30 horas.
-Entonces tendrán un número importante de fanáticos junto a ustedes en Lollapalloza...
-¡Claro! ¡Será un honor tocar allá! Ni siquiera hemos tocado en Lollapalooza de Estados Unidos, ¡ja! Miré el lineup y está entetenido. Pero más que todo eso, me emociona ir a Chile porque tengo una amiga de infancia que es chilena, compartimos mucha música interesante y ella terminó yéndose de vuelta. Hace años que no la veo. Así que, de cierto modo, siempre he tenido un punto débil en mi corazón por ese país y siempre pensé que iría. Estoy feliz que sea de este modo.
-Tal vez tu amiga vaya a verlos ese día...
-Me gustaría juntarme con ella. De hecho, sería grandioso. Pero puede que ella no me quiera ver, porque parece que yo le gustaba y creo que está casada. ¡Quizás me odia ahora, jaja!
-¿Ya están pensando en un nuevo disco?
-No paramos de tocar hasta un par de meses atrás. Estuvimos de gira por dos años y medio, y recién ahora nos pudimos enfocar en grabar un nuevo disco. Estamos grabando casi todo en mi cocina en 12th St. El anterior fue grabado en mi pieza, así que es un nuevo esfuerzo casero.
-¿Y qué viene luego, el baño?
-¡Jaja! He escuchado de discos grabados en el baño. Para nosotros tiene que ver con lo que nos hace sentir más cómodos. Yo compongo casi todo, y encuentro que me es muy difícil hacerlo si no estoy en un estado mental muy específico. Mucha gente escribe cuando está de gira o en cualquier lado, pero creo que quizás yo soy muy sensible.
-Entonces eres de los que no necesita de estudios caros...
-Claro, creo que muchos discos que adoro, e incluso nuestro primer disco, han sido grabados del modo más simple posible. El nuestro fue muy barato, porque apenas teníamos guitarra, teclados y computadores para grabar, usando unos micrófonos que nos costaron 35 dólares. Para nosotros lo más importante es la canción, no la producción. Ojalá que la gente entienda que eso es lo importante, y creo que eso ocurre.
-En 2010 medios como MTV y NME hablaban muy seguido de ustedes como la gran banda nueva, ¿cómo lidiaron con eso?
-Tengo la suerte de haber pasado por lo mismo con mi banda anterior, que hace unos años generó mucho ruido y luego se desinfló. Además la banda se terminó disolviendo y no fue la mejor experiencia, por lo que esta vez no es tema esta expectativa, pero tuve que entender que eso no tiene que ver con la banda, sino con lo que los demás esperan. Es gracioso cuando la gente se enoja con las bandas por hacerse un poco famosas y generar expectativas, porque la banda no tiene nada que ver con eso. Lo que hemos hecho es ignorar todo eso y trabajar duro.
-Las canciones del primer disco muestran un amor por la música británica, y son algo melancólicas. ¿Ha cambiado la manera en que escribes?
-Mis bandas favoritas, como The Smiths, The Strokes o Ramones, son conocidas por tener un sonido muy consistente a lo largo de su carrera. Me encanta que da lo mismo la canción que escuches de la banda: Sabes que es de ellos. Eso es lo que queremos hacer, seguir haciendo lo mismo. ¡Aunque quiera escribir diferente, no creo que sea posible! He tratado de escribir canciones alejadas de mi tendencia natural, pero ella siempre gana: Si me siento a componer sobre estar feliz y enamorado, termina siendo una canción sobre desesperanza, ¡aunque no me sienta así, jaja! La felicidad es demasiado simple. La tristeza es más compleja.