RÍO DE JANEIRO.- La crisis en el seno de la Orquesta Sinfónica Brasileña (OSB), una de las más importantes del país sudamericano, se agudizó hoy, al confirmarse los despidos de 36 de sus 82 músicos que se negaron a someterse a audiciones de evaluación exigidas por el maestro Roberto Minczuk.
Los ceses fueron confirmados en una nota oficial divulgada por la Fundación Orquesta Sinfónica Brasileña (FOSB), tras el fracaso de negociaciones destinadas a superar la crisis que estalló hace casi tres meses, y que está considerada como la peor de los 70 años de historia del grupo de músicos.
"La FOSB siempre creyó en un desenlace positivo y se esforzó al máximo para atender a las solicitudes del grupo de músicos, pero desafortunadamente no hubo consenso", expresó el comunicado de la fundación, que se negó a atender a la principal exigencia de los músicos rebeldes: el despido de Minczuk.
La fundación iniciará en la segunda quincena de mayo audiciones de candidatos en Londres, Nueva York y Río de Janeiro para sustituir a los músicos despedidos y programó para el 3 de junio el inicio de la temporada de la OSB.
Los músicos despedidos, a su vez, programaron para el sábado próximo un concierto en Río de Janeiro, que tendrá como solista a la famosa pianista Cristina Ortiz, quien, conjuntamente con el pianista Nelson Freire, formó parte del grupo de astros de la música clásica brasileña que cancelaron sus presentaciones acordadas para este año con la FOSB, en protesta contra las medidas anunciadas por Minczuk.
El maestro, a su vez, afirmó que el programa de evaluaciones forma parte de "un proyecto artístico y también administrativo", destinado a mejorar el nivel de la OSB, cuyos integrantes pasarán a recibir salarios más elevados, equivalentes a entre 5.900 y 7.000 dólares mensuales: "Pocas orquestas, incluso europeas, pagan lo que la OSB propone para sus músicos", sostuvo Minczuk.