Novelista española reescribe el diario de Marie Curie y lo adapta a un proceso de duelo

MADRID.- Detrás de la biografía "oficial" de esa pionera en casi todo que fue Marie Curie se esconde también una historia mucho más íntima, profundamente marcada por la muerte de su marido Pierre. Aquella traumática experiencia, esos primeros momentos de duelo, quedaron plasmados un breve diario que ahora rescata la escritora española Rosa Montero.

"La ridícula idea de no volver a verte" es un libro híbrido, que salta de lo personal a lo novelesco hilando una conversación cómplice con el lector. A Montero (Madrid, 1951) le asaltó por casualidad, cuando estaba atascada en otra novela y recibió un mail de la editora de Seix Barral para que escribiera un prólogo al diario de Curie. Y entonces, aquel pequeño texto de apenas 28 páginas estalló en su cabeza.

"De pronto se convirtió en una especie de espejo de aumento en el que podía ver mi vida e incluso la vida de todos, que reflejaba los pensamientos, ideas y preocupaciones que yo había estado masticando en los últimos años", cuenta la escritora. Y es que ella, como Marie, también había perdido hacía tres años a su pareja -el periodista Pablo Lizcano- y leer aquel diario "fue como si se levantaran islas emergiendo de un mar oscuro".

"Cuando pierdes a alguien, lo primero que te pasa es que no lo puedes asumir, no te cabe en la cabeza y te parece ridículo y absurdo", explica sobre el título del libro. "Una vida ocupa tanto espacio en todos los sentidos, físico, en la memoria, y de repente desaparecemos como una voluta de humo". Por eso, ésta es quizá la obra más explícitamente autobiográfica de la narradora, más proclive a coquetear con la ciencia ficción que a hablar de sí misma.

"Yo me doy cuenta de que soy muy púdica", explica. Siempre le costó entender el "uso artístico" que muchos hacen del dolor, desde el "Tears in Heaven" de Eric Clapton a "Paula", la novela que Isabel Allende publicó tras la muerte de su hija. "Jamás pensé que en mi vida escribiría un libro sobre el duelo". Y en gran parte este lo es. "Había cosas que querían salir, y quizá ahora puedo hablar de ello porque ya lo he convertido, lo mismo que con mis novelas, en una experiencia común."

Así, entre anécdotas, vivencias y algunas fotografías suyas o de los Curie, la autora de "La hija del caníbal" va desgranando detalles hasta ahora desconocidos sobre esta sorprendente mujer polaca. Pionera en el campo de la radiactividad, Marie Curie fue la primera licenciada en ciencias en la Sorbona, la primera doctora en ciencias de Francia, la primera mujer en recibir un premio Nobel y la única distinguida con dos (Física y Química). Pero también fue "un personaje anómalo y romántico que parece más grande que la vida", escribe Montero.

Fue "sobre todo el tesón, la tenacidad con la que supo sostener su deseo contra todas las circunstancias", lo que más impresionó a la escritora. Y recuerda un apunte de Curie, cuando a los 14 años terminó el colegio y soñaba con seguir estudiando en una Polonia donde, como en muchos países, a las mujeres les estaba prohibido. "Ella leía por las noches, porque había oído que las mujeres podían estudiar en San Petersburgo y Francia. Había oído -subraya- casi como una cosa legendaria, como que hay vida en Marte. Y lo consiguió."

Desde la superación del dolor al apasionamiento y el aprendizaje de vivir con ligereza, "La ridícula idea de no volver a verte" suena a "susurro íntimo y sosegado con alguien", dice Montero. "Escribir una novela es como picar piedra, te cuesta muchísimo (...) Pero ésta salió como un torrente". De alguna manera, fue como si el libro ya estuviera escrito, como si lo hubiera estado rumiando durante mucho tiempo.