LA PAZ.- El gobierno boliviano aclaró hoy que mantendrá su política de denuncia de su mediterraneidad ante los foros internacionales y en el diálogo que inició con Chile para la solución de su enclaustramiento que perjudica su desarrollo e impide una mayor integración regional.
La afirmación la hizo el ministro de Relaciones Exteriores, Javier Murillo de la Rocha, ante versiones que aseguraban ayer que el Presidente Hugo Banzer dejará de lado el asunto en sus intervenciones en foros internacionales, a cambio de intentar una "solución negociada" con Chile.
"Bolivia no cambiará su política exterior en este sentido porque la solución de su mediterraneidad no sólo la beneficiará, sino también a la comunidad internacional y a la paz regional", recalcó Murillo.
Desde que asumió el mando de la nación en agosto de 1997, Banzer ha retomado las banderas tradicionales de la reivindicación marítima y en todas las reuniones internacionales a las que asistió hizo conocer con claridad la posición boliviana.
Bolivia perdió su acceso al mar en una guerra con Chile en 1879. Los gobiernos posteriores han reclamado por la solución del problema que es considerado por las autoridades como un freno para su desarrollo.
Los dos países tienen suspendidas sus relaciones diplomáticas desde 1978, al fracasar las negociaciones tendientes a solucionar sus diferendos, en especial el relacionado con la mediterraneidad.
Durante el primer gobierno del general Banzer, entre 1971 y 1978, propició un reinicio de las relaciones con Chile, gobernado entonces por el general Augusto Pinochet, y en 1975 suscribió un histórico acuerdo que permitía a los dos gobernantes "lograr soluciones como soldados antes que como políticos".
Esos propósitos se frustraron tres años después por la falta de acuerdos, lo que llevó a una nueva ruptura de las relaciones.
Murillo de la Rocha reiteró hoy que carecen de todo sustento las versiones que indicaron que Banzer "dará un giro casi total a la política marítima".
Las versiones desmentidas hicieron que varios ex cancilleres se pronunciaran al respecto criticando la supuesta decisión presidencial.
El ex canciller Valentín Abecia dijo hoy que si Banzer cambia la política de reivindicación marítima "no le queda otro camino que renunciar".
Murillo recordó que Bolivia retomó su diálogo bilateral con Chile en el ámbito de cancillerías a fines del año pasado con el fin de analizar una agenda abierta que incluya en forma prioritaria la solución de la mediterraneidad, que es uno de los temas más candentes que impiden un acercamiento entre las dos naciones.
