SANTIAGO.- La conmoción causada por los cuatro pequeños que fueron descubierto en el más absoluto abandono y al borde de la muerte -dos de ellos-, por Carabineros de la comuna de Renca el domingo 2 de julio, está lejos de terminar (de hecho apareció un quinto hermano).
Pese a que la pequeña Macarena Paillacán Muñoz de 1 año 4 meses se recuperó del coma de 24 horas que la mantuvo internada 5 días en el hospital Calvo Mackenna, su historia quedó inconclusa...
Según informó El subdirector médico del Hospital Calvo Mackenna, doctor Juan de Dios Reyes, "aunque la niña permaneció cinco días en el hospital y se le practicaron diversos exámenes, nunca se determinó la causa exacta del coma de 24 horas con que ingresó al recinto".
El facultativo aseguró que los exámenes toxicológicos -en los que se buscan cerca de 21 sustancias que pudieron originar el cuadro-, arrojaron resultados negativos. Por ello, se concluyó que a la menor no se administró alcohol, drogas, ni golpes.
Según reveló, una de las posibilidades es que Macarena sufriera una intoxicación por un bracero que consumió el oxígeno del lugar donde permanecía.
Sin embargo, la situación más grave fue y sigue siendo la de su hermanita Romina de 11 años, quien ingresó en estado vegetal al hospital Félix Bulnes, producto una hidrocefalia originada por una desnutrición desde su gestación, y no de maltrato físico como se pensó en principio.
Explicaron en el Félix Bulnes que Romina se encuentra estable, "pero el cuadro con que ingresó era tan fuerte y agudo que la menor tendrá secuelas para toda su vida", afirma una de las enfermeras a cargo de su cuidado, quien agrega que la menor está lista para ser dada de alta.
El Servicio Nacional de Menores, Sename, informó que apenas salga, Romina será derivada a uno de sus centros de rehabilitación, al igual como ocurrió con su hermana Macarena, quien permanece en la Casa Nacional del Niño.
Respecto a sus otros hermanos; Johnathan de 13 años está en el Centro de Tránsito y Distribución Pudahuel, bajo un programa especial de desintoxicación alcohólica; Michel se fue a la casa de una tía y Francisco -de quien no se sabía nada hasta ahora- permanece en el mismo lugar de Johnathan, a la espera de lo que resolverá el Sexto Juzgado de Menores, a cargo del caso.
Aunque por muchas vías se ha insistido en que los menores serán arrebatados a sus padres y puestos en manos más interesadas en cuidar bien de ellos, en el Sename sostienen que la idea es recuperar a la familia y unirla nuevamente.
Para esto último, como requisito básico, es que sus padres se recuperen de su adicción al alcohol, lo que "es muy difícil, por lo que se prevé una larga estadía de los menores en mi centro", asegura Lissette García, jefa del Departamento de Programas del Sename.
El Sexto Juzgado de Menores, será finalmente la instancia legal encargada de dictaminar el futuro de los cuatro menores; sus padres, protección del Sename, derivados a un hogar o remitidos a familiares dispuestos a cuidar de ellos...e ahí el dilema.
