SANTIAGO.- El pastor de la iglesia Metodista Pentecostal, Enrique Vilches Millar, acusó al ministro secretario general de Gobierno, Claudio Huepe, y a los integrantes del Comité de Organizaciones Evangélicas (COE) de "mentir y querer bajarle el perfil" a los antecedentes sobre el paradero de detenidos desaparecidos que entrego el pasado 2 de agosto en el Palacio de La Moneda.
"El (refiriéndose a Huepe) llamó como representantes de la iglesia evangélica a integrantes del Comité de Organizaciones Evangélicas (COE) que no representan a la iglesia evangélica, para sistemáticamente plantear una mentira buscando desprestigiar esta entrega de antecedentes", precisó.
Añadió que, en su opinión, "aquí hay un trasfondo que es bajarle el perfil fuertemente a la información que entregáramos porque hay malestar implícito en algunos miembros de las Fuerzas Armadas y que obviamente el Gobierno quiso responder".
Explicó que el COE es un organismo de la iglesia evangélica conformado exclusivamente para trabajar en la Ley de Culto y después desapareció, es decir, indicó, no cuenta con personalidad jurídica.
Añadió que "aquí ha habido una maquinación de personas que participaron en el Gobierno de don Augusto Pinochet, gente como don Francisco Anabalón. Ellos no tienen la personalidad jurídica como iglesia evangélica, por lo tanto, no pueden arrogarse la representación que no tienen y que no les corresponde legalmente".
Respecto de las críticas emanadas del Gobierno a la forma como se hizo llegar la información al Ejecutivo, Vilches dijo que "ni el gobierno ni nadie tiene la facultad para criticar la información calificándola de buena o mala. Es la justicia, la que tiene la responsabilidad de que los antecedentes sean investigados seria y responsablemente".
Respecto de la participación del obispo metodista Nefatalí Aravena en la mesa diálogo y a su eventual rol de canalizador de la entrega de información, el pastor Vilches aseguró que "nadie puede tener hoy la capacidad moral de decir que representa a la iglesia evangélica, porque somos más de siete mil quinientas corporaciones, entre las que hay sólo 700 con personalidad jurídica y el COE no agrupa a más de diez".
El pastor denunció, finalmente, haber sido "sometido a toda clase de vejámenes. Tengo todas mis empresas intervenidas telefónicamente de manera ilegal y hemos sido fuertemente presionados y hasta el día de hoy hemos callado ante estas presiones".