SANTIAGO.- La ministra de Salud, Michelle Bachelet, resaltó los esfuerzos que hace la autoridad para erradicar los focos de contaminación con plomo en la zona norte del país.
La situación más grave se registra en la ciudad de Arica, específicamente en el barrio industrial, lugar donde la empresa Promel depositó, en 1984, 20 mil toneladas de concentrado de minerales, cargados de plomo y arsénico y que, al quebrar la compañía, nadie se había hecho cargo de los residuos, los cuales provenían de Europa.
Eso motivó que en 1998 se realizara el primer estudio epidemiológico de la población, especialmente con niños.
De los 4 mil 982 exámenes realizados, 117 personas superaron de forma alarmante la norma mundial de contaminación por plomo, hecho que motivó la inmediata reacción del Ministerio de Salud.
La secretaria de Estado indicó que, en una primera etapa, el gobierno se hizo cargo de trasladar el material contaminante hasta un lugar despoblado.
Actualmente, se trabaja en un sellado asfáltico del terreno contaminado para luego colocar sobre esa superficie una capa de material inerte.
Paralelamente, señaló que inició esta semana comenzó una campaña para entregar medicinas y alimentos a las personas afectadas, esperando que se llegua a la mayor cantidad de gente posible.
La ministra de Salud agregó que el plan integral contempla, además, acciones en el área educacional, ya que se comprobó que los niños afectados con plomo presentan, en muchos casos, problemas en el aprendizaje.
Puntualizó que debido a esto se dispuso de programas especiales para capacitar a los profesores frente al problema.
Agregó que la idea es que durante los próximos años la zona norte del país esté libre de contaminación con plomo y otros materiales de desecho industrial que países desarrollados no aceptan por su peligrosidad.
