VALPARAISO.- La comisión de Derechos Humanos del Senado decidió acoger esta semana el llamado de la Iglesia Católica, en el sentido de tener clemencia con los privados de libertad, en el marco del Jubileo 2000, según informó el presidente de la instancia, José Antonio Viera Gallo (PS).
El legislador indicó que se acordó presentar en la última semana de noviembre una moción en que se propondrá un indulto general, "pero bastante más restrictivo que el solicitado".
Señaló que, además de él, respaldarían la moción los senadores Mario Ríos (RN), Enrique Silva Cimma (Inst.) y Hossain Sabag (DC), mientras que el senador Beltrán Urenda (UDI) esperaría analizar más antecedentes sobre los eventuales beneficiarios del indulto antes de suscribir la iniciativa.
En tanto, Silva Cimma destacó que "no saldrá en libertad nadie que represente un peligro para la sociedad" y anticipó que no podrán optar al beneficio los condenados por delitos de sangre, sexuales ni narcotráfico.
Resaltó que la comisión también propondrá el cambio de pena de presido por la de extrañamiento respecto de condenados que están físicamente inhabilitados para desplazarse, como es el caso de diez inválidos recluidos en distintos recintos penitenciarios del país.
Sostuvo que la propuesta no beneficiará a más de 500 personas, incluyendo a mayores de 80 años. "El indulto consistirá más bien en la rebaja de la pena en dos o tres meses, en el caso de las reclusas con hijos menores de 18 años y los hombres mayores de 60", especificó.
Señaló que ya se han hecho las gestiones pertinentes con el Ejecutivo para que le dé su patrocinio y así la iniciativa pueda ser tramitada en esta legislatura.
Acotó que la respuesta del Gobierno fue positiva, pero condicionada a que concite el mayor consenso posible entre los distintos sectores políticos.