SANTIAGO.- Sigue la guerra de declaraciones entre la Democracia Cristiana y la Unión Demócrata Independiente por la representatividad de los sectores populares del país, luego que la colectividad gremialista se proclamara ayer en su consejo general como el "Partido Popular", slogan que los representantes de la DC alegan como suyo.
El nuevo Secretario General del partido gremialista, el Diputado Patricio Melero, insistió en que la DC perdió esa nominación ya que "abandonó a los sectores populares hace mucho tiempo. Es por eso que nos reímos cuando Gutenberg Martínez, a propósito de la frase 'partido popular', dice que 'la mona aunque se vista de seda, mona queda'... si ellos han sido los que se han vestido de seda y engañaron a la gente", dijo.
En ese sentido, agregó que representantes de la DC adquirieron en su gobierno "jugosas indemnizaciones y ganaron millones de pesos, olvidándose de los sectores populares. Entonces de qué se quejan ahora", sentenció.
Por su parte, la Democracia Cristiana salió al paso de las críticas del gremialismo, sosteniendo que no dejará a la UDI ganar más terreno del que ya ha conseguido. Así lo afirmó el Secretario Nacional de la colectividad, diputado Jaime Mulet, quien señaló que la UDI "no va a ser gobierno en el 2006 porque arrastra la herencia del gobierno militar".
Si bien el dirigente reconoció que su partido ha perdido representatividad en los sectores populares ante la UDI, aseguró que están trabajando para recuperar la adhesión que ostentaban.
"Efectivamente la DC perdió base popular pero hoy día a la UDI le salió la DC al paso. La DC está preocupada de recobrar la fuerza de sus orígenes, de ser un partido de centro progresista, preocupado por los pobres y la clase media", aclaró.
Mulet insistió en que la inscripción del slogan "partido popular", que la DC quiere hacer suyo para el surgimiento de una colectividad más joven, es una muestra más del estilo "facistoide" del timonel gremialista y sus correligionarios porque, en su opinión, lo que hay detrás de la imagen que quiere dar la UDI es la "continuación de la dictadura por medio de un engaño", dijo.
Mulet criticó duramente a Longueira por el apoyo que éste manifestara a Lavín por la venta de los derechos del consumo de agua de la Municipalidad de Santiago. A su juicio, Longueira "sigue promoviendo la política del Gobierno Militar de vender los bienes estatales".