SANTIAGO.- El Sindicato Nacional de Operadores Postales de la Empresa de Correos de Chile, informó que en el plan de desvinculación de 1.600 trabajadores de aquí a fin de año no se respetó el contrato colectivo recientemente firmado, que establece un programa de retiro pactado de carácter voluntario, porque sólo 400 de los funcionarios que cesarán en sus funciones están dentro de esa alternativa, mientras el resto se trata de casos "no voluntarios o prescindibles".
Para el presidente de la entidad gremial, Jaime Romero, la administración de la Empresas de Correos de Chile al dar a conocer los alcances reales del "Plan de desvinculación", reflejó la verdadera faceta del éste: destrucción de empresas estatales.
De acuerdo al detalle por estamentos, deberán dejar la empresa 20 analistas; 270 carteros: 160 asistentes técnicos; 55 cajeros: 15 jefaturas; 785 operadores postales; 25 secretarias; 80 servicios generales; 104 supervisores, 65 técnicos; 6 vendedores y 15 vigilantes.
