SANTIAGO.- En noviembre próximo comenzarán a pagarse las 18 mil nuevas pensiones asistenciales que el Presidente de la República había comprometido en junio pasado, anunciaron hoy el ministro secretario general de Gobierno, Francisco Vidal, y la superintendente de Seguridad Social, Ximena Rincón.
"Esa es la forma concreta como este Gobierno ayuda a los más rezagados, a los más desamparados, a los que van quedando atrás", subrayó Vidal, quien destacó que se trata de "una buena noticia para los más pobres de Chile".
El otorgamiento de 18 mil nuevos cupos de pensiones asistenciales, que junto a la distribución permanente de 2 mil cupos mensuales, disminuye de modo gravitante la lista de espera, la que a marzo de este año llegaba a cerca de 29 mil personas, y hoy, tras esta decisión gubernamental, se reduce aproximadamente a 6 mil 700 postulantes, lo que significará un gasto mensual aproximado de 760 millones de pesos.
Al respecto, Vidal afirmó que "haremos un esfuerzo adicional para lograr que idealmente el próximo año no quede nadie en lista de espera de pensión asistencial, que por modesta que sea para muchos chilenos y chilenas pobres, enfermos o inválidos, viejitos, esta pensión constituye una forma de enfrentar la vida en momentos difíciles".
Por su parte, Ximena Rincón recordó que "al menos el 50% de las pensiones asistenciales que hoy paga nuestro país van a personas discapacitadas o inválidas, es decir, aquellas que son menores de 65 años que tienen algún problema de salud y que viven en condiciones de pobreza. El otro 50% va a personas mayores de 65 años que son pobres, y que de acuerdo también al anuncio del Presidente Ricardo Lagos, a partir de este mes van a tener una pensión mejorada cuando sean mayores de 70 años o de 75".
