SANTIAGO.- La Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, anunciará la próxima semana un proyecto para una profunda reforma del sistema privado de pensiones, instaurado en 1981 por la dictadura de Augusto Pinochet, informaron hoy fuentes oficiales.
"Estamos ya en los últimos ajustes del proyecto de ley. Los contenidos ya han sido plenamente definidos por la Presidenta, así es que los detalles los informará ella", dijo a los periodistas el ministro de Hacienda, Andrés Velasco.
El bajo monto de las pensiones y la obligación del Estado de garantizar una pensión mínima a todos los chilenos llevó al gobierno a crear una comisión especial, integrada por quince expertos, que en julio pasado entregó a la mandataria un informe con 70 propuestas de modificaciones al sistema.
Estas se refieren a once áreas de trabajo que incluyen cobertura, equidad de género, competencia, inversión de los fondos de pensiones, educación y disciplina financiera, entre otras cuestiones.
La comisión también planteó como asunto central la creación de un nuevo pilar solidario, que reemplace a las actuales pensiones mínimas y asistenciales y asegure este derecho de protección social para todos los chilenos, independiente de lo que hayan acumulado durante sus años de actividad laboral.
El documento fue debatido por el gobierno, que lo transformó en un proyecto de ley. Velasco declinó comentar los contenidos específicos del proyecto o la fórmula de financiación que se propondrá, detalles que serán dados a conocer por la Presidenta, dijo.
En tanto, el ministro del Trabajo, Osvaldo Andrade, sostuvo que ésta es la reforma social más relevante del gobierno de la socialista Bachelet, que asumió en marzo pasado.
"La gente puede tener la más absoluta tranquilidad ya que haremos el mayor esfuerzo como gobierno, con el Parlamento para aprobar rápidamente el proyecto de ley que permita que se paguen pensiones decentes", subrayó.
El actual modelo de pensiones chileno, administrado por seis empresas privadas y que ha sido exportado a otros países, es objeto de muchas críticas, entre ellas por el alto monto de comisiones que cobran las Administradoras Privadas de Fondos de Pensiones (AFP) y el bajo monto de las pensiones que otorga.